Una familia ofrece 200.000 euros al año a un tutor que le dé un "entorno cultural integral" a su bebé

Todos los padres quieren lo mejor para sus hijos y, normalmente, sea como sea el pequeño, siempre piensan que es altamente especial o que tienen habilidades fuera de lo común. Un futuro prometedor es lo que se busca, pero algunos no quieren esperar demasiado para que se vea cómo se van desarrollando y se ponen manos a la obra desde el primer momento, y eso que los expertos aseguran que las altas capacidades no se detectan tan fácilmente en los primeros compases de la vida, sino que puede ser algo gradual y, normalmente, se encuentran en aspectos que a veces se pasan por alto.

Además de un coeficiente intelectual alto, las personas con altas capacidades a menudo presentan otras características como una gran sensibilidad emocional, como explicaban hace unos meses en 'La Ventana de Castilla-La Mancha' tanto Marta Díaz, maestra y psicopedagoga, como Nuria Fernández, madre de un niño con estas habilidades. De hecho, Nuria empezó a sospechar de lo que le ocurría a su hijo porque desde muy pequeño demostraba tener una memorización y sensibilidad fuera de lo común. Pero, como decimos, algunos creen que la clave para llegar a altas cotas de éxito intelectual está en las rutinas y estímulos.

Es el caso de unos padres que han decidido empezar a preparar a su hijo de un año para que en el futuro entre en las escuelas más prestigiosas de Inglaterra. En The Guardian se han hecho eco del anuncio que ha hecho una familia adinerada afincada cerca de Londres que está buscando "un tutor que proporcione un entorno cultural británico integral" para su bebé, ofreciendo un salario anual muy suculento: 180.000 libras esterlinas (más de 200.000 euros). Pero los requisitos para acceder a este puesto no son para nada asequibles para todos.

Un tutor a la carta

El anuncio, publicado en Tutors International, explica que "sus padres buscan criar a un niño verdaderamente bicultural. Tras empezar a los cinco años con su hermano mayor, sintieron que incluso entonces era demasiado tarde para lograr su objetivo, por lo que ahora buscan un tutor", por lo que quieren encontrar un tutor "extraordinario" que debe cumplir una larga lista de criterios, como tener un acento inglés con pronunciación recibida; teoría musical “razonable”; conocimiento de cricket, tenis, rugby, polo y remo; capacidad para fomentar la coordinación mano-ojo y los buenos modales; familiaridad con la educación de los primeros años, incluidas las pedagogías Montessori y Reggio Emilia; y formación en primeros auxilios, escriben en el medio británico.

También piden que haya asistido a "las mejores escuelas y universidades de Inglaterra", que haya sido "criado en un entorno socialmente apropiado, educado y culto, con excelentes modales y valores personales", tener una amplia gama de experiencias típicamente británicas con el fin de que el niño adquiera hábitos, perspectivas, gustos y preferencias deportivas, así como no deben ser fumadores. Además del increíble salario, ofrecen aparcamiento gratuito y cuatro semanas de vacaciones al año por una labor que esperan que desemboque en que su hijo termine siendo aceptado en un colegio de alto nivel como Eton, St. Paul's, Westminster o Harrow, para lo que quieren una educación exclusiva desde la primera infancia.

Desde el primer momento puede hacerlo visitar Lord's, Wimbledon y Twickenham, museos, galerías de arte y teatros, combinándolos con otros lugares más sencillos como parques, cafeterías o bibliotecas para que aprenda los primeros conocimientos básicos tales como los colores, números, letras, cuentos, sabores y música. En The Guardian aseguran que, con un anuncio tan sorpresivo como explícito, desde Tutors International han tenido que hacer hincapié en que el anuncio y la familia son reales, por lo que han pedido que los solicitantes se lo tomen en serio y que se presenten personas con experiencia previa trabajando "en residencias privadas, embajadas o casas reales", preferentemente.