Sociedad

La juez decreta el ingreso en prisión del investigado por el asesinato de su hermano en Tafalla

La víctima presentaba 15 heridas de un objeto cortante, ocho el cuello; y el acusado ha reconocido los hechos. La defensa había solicitado que se le ingresase en un centro psiquiátrico, medida que "no se va a adoptar", ya que "no parecía sufrir ningún brote psiquiátrico siendo muy consciente de lo que decía o hacía"

Audiencia de Navarra / Navarra.es

Pamplona

La juez decreta el ingreso en prisión del investigado por el asesinato de su hermano en Tafalla. En su declaración judicial, ha reconocido los hechos. El motivo para la adopción de la medida de prisión provisional es evitar el riesgo de fuga ya que el investigado carece de arraigo laboral y familiar.

Recoge el auto que los hechos vienen acreditados por la confesión del detenido César Gascón, quien, se presentó en la comisaría de Policía Foral de Tafalla manifestando que había matado a su hermano. En el atestado policial se dejó constancia de que el cuerpo presentaría un mínimo de 15 heridas producidas por un elemento cortante, al menos ocho de ellas en la zona del cuello. Por la defensa se solicitó que se le ingresase en un centro psiquiátrico, medida no adoptada, ya que según recoge el auto "no parecía sufrir ningún brote psiquiátrico siendo muy consciente de lo que decía o hacía. Es mas, su versión de los hechos ha sido idéntica a la que manifestó a Policía y no se detectaron además restos de consumo de drogas o alcohol".

Señala así que el presente momento, "y sin perjuicio del resultado de las investigaciones pendientes de efectuar", los hechos constituyen un delito de asesinato. Además, señala, concurría en el presente caso la circunstancia mixta de parentesco, actuando como agravante. Por tanto, "las penas de prisión atribuidas al delito objeto de investigación superan con creces los dos años que exige el art. 503 de la LECrim para acordar la prisión provisional".

Asimismo, la juez indica que "los indicios de delito son contundentes contra el investigado". Con las cautelas propias del momento procesal del caso, manifiesta que "los hechos vienen acreditados indiciariamente por la confesión del detenido, César Gascón, quien se presentó en la comisaría de Policía Foral de Tafalla manifestando que había matado a su hermano". Además, apunta que el investigado presentaba en aquel momento restos de sangre por su ropa.

Según expone el auto, en el acta del levantamiento del cadáver que se efectuó el martes por el juzgado, se dejó constancia de que en la vivienda en la que residían ambos hermanos se encontró el cuerpo ya sin vida de Marcos Gascón con restos de sangre en cara y cuerpo y heridas que parecían haberse provocado presuntamente por un arma blanca (un cuchillo de cocina).

En el atestado policial, añade, se recogió que el cuerpo presentaría un mínimo de 15 heridas producidas por un elemento cortante, localizándose al menos ocho de ellas en la zona del cuello. Y se fotografío el cuchillo de cocina ensangrentado que se encontró al lado del cadáver. Al investigado, en el momento inmediatamente posterior a su detención, se le efectuaron pruebas de detección de consumos previos de alcohol y drogas, dando resultado negativo.

La autopsia

Del informe previo de autopsia efectuado al fallecido, expone el auto, se han constatado como causa de la muerte inmediata shockhipovolémico-rotura aortica y herida por arma blanca, "ello sin perjuicio de lo que pueda constatarse posteriormente en el informe definitivo de autopsia".

Según el auto, el investigado, en su declaración en sede judicial este miércoles, ha reconocido los hechos intentando justificar su actuación en que llevaba mucho tiempo discutiendo con su hermano y que éste le había amenazado en muchas otras ocasiones. Ha negado haber bebido alcohol ni tomado drogas antes de cometer estos hechos, manifestando que sufrió un "arrebato"; tras discutir con él por varios objetos personales.

Además, ha señalado que padece lo que él llamó un 'trastorno disocial de la personalidad' pero ha indicado que no está siguiendo ningún tratamiento. También ha justificado su actuación diciendo que su hermano había estado en la cárcel y que también tenía trastornos psicológicos.

La juez argumenta que el motivo para la adopción de la medida de prisión provisional es evitar el riesgo de fuga e indica que al delito investigado se le atribuyen penas de prisión graves que "supondrían el deseo del investigado de querer huir del país para evitarlas".

Asimismo, recoge que el investigado carece de arraigo laboral y familiar, no trabaja ni desarrolla actividad profesional, no tiene hijos ni consta que tenga pareja sentimental, ni propiedades a su nombre, mas allá de la vivienda en la que vive que parece ser de su madre y hermanas, a parte de él. Por tanto, expone la juez, en atención a las elevadas penas de prisión que se atribuyen al delito presuntamente cometido y la falta de arraigo del detenido, "el riesgo de fuga resulta patente".

Explica el auto que la defensa ha solicitado alternativa y subsidiariamente que se le ingresase en un centro psiquiátrico, una medida que "no se va a adoptar". "Al investigado se le veía tranquilo y no parecía sufrir ningún brote psiquiátrico siendo muy consciente de lo que decía o hacía. Es más, su versión de los hechos ha sido idéntica a la que manifestó a la Policía y no se detectaron además restos de consumo de drogas o alcohol", indica.

Por otro lado, aunque el investigado ha manifestado sufrir un trastorno de la personalidad, ha reconocido no estar en tratamiento por ello. "Por consiguiente, en este momento, la medida cautelar que procede es la de prisión provisional. Ello sin perjuicio de lo que se pueda acordar en otro momento", ha concluido.