Navarra recuperará la competencia exclusiva de tráfico el próximo 1 de julio

Pamplona

Navarra asumirá a partir del próximo 1 de julio la competencia del control del tráfico en todas las carreteras del territorio foral en exclusiva. Esto supondrá que la Policía Foral será el único cuerpo que patrullará y atenderá lo que ocurra en las vías y también que las multas de tráfico y sus cuantías serán gestionadas y cobradas por la Administración Foral.

El acuerdo final ha sido anunciado este jueves por la mañana en el atrio del Parlamento por la presidenta navarra, María Chivite (PSN) y culmina años de negociaciones entre el ejecutivo navarro y el central. Los detalles de la recuperación de esta competencia se comunicarán el próximo martes 14 en la junta de transferencias, de la que forman parte el ejecutivo foral y las fuerzas presentes en el Parlamento.

La fecha del 1 de julio supondrá la asunción formal de las funciones, aunque el despliegue completo de la Policía Foral será de manera gradual y compaginarán funciones con la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Durante ese periodo transitorio se incorporarán a la Policía Foral 150 nuevos agentes para cubrir las necesidades de personal que genera esta nueva competencia.

La normativa foral de Policías contempla la posibilidad de que agentes de la guardia civil de Tráfico puedan pasar al cuerpo autonómico. Actualmente son unos 180 los que componen esta agrupación del Instituto Armado y, tal y como avanzó el Ministerio de Interior, podrán elegir entre utilizar esa "pasarela legal" a la Policía Foral, pedir otro destino dentro de la propia Agrupación de Tráfico o quedarse en Navarra prestando otros de los servicios encomendados a la Guardia Civil.

Actualmente son 1600 agentes de este cuerpo los que están destinados en Navarra, repartidos en 53 cuarteles. Realizan funciones de seguridad pública, especialmente en el ámbito rural, rescate en montaña, protección de la naturaleza o control de armas, entre otras. El control de las carreteras era una competencia exclusiva de Navarra hasta que la dictadura de Franco decidió arrebatarla. Su recuperación y la prestación de este servicio en exclusiva por la Policía Foral era una reclamación histórica de la comunidad y ya, durante el gobierno de José María Aznar (PP), se había avanzado en su recuperación por parte del entonces presidente navarro Miguel Sanz (UPN). En octubre de 2018, en el encuentro entre el presidente español Pedro Sánchez (PSOE) y la entonces presidenta navarra Uxue Barkos (Geroa Bai) se anunció el acuerdo para llevar a cabo este traspaso. No obstante, la parálisis administrativa que se generó durante casi un año sin formar gobierno en Madrid dejó en dique seco este asunto hasta finales de 2019 cuando se recuperaron las negociaciones entre las dos administraciones ya con María Chivite como presidenta navarra.

En el encuentro que mantuvo Chivite a principios de febrero en el Palacio de Navarra con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ambos apuntaron a que antes del final de la legislatura navarra se culminarían las negociaciones que, reconocieron, son "técnicamente complejas". El acuerdo se formalizará el próximo martes, 3 semanas antes de que el Boletín Oficial de Navarra publique la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones para el próximo 28 de mayo. La Policía Foral cuenta actualmente con 1.078 agentes repartidos en 7 comisarías; Pamplona, Tudela, Estella, Tafalla, Alsasua, Elizondo y Sangüesa. Están estructurados en cinco áreas; Inspección General, Seguridad Interior, Tráfico, Seguridad Ciudadana e Investigación. Además del tráfico a partir del 1 de julio, este cuerpo autonómico realiza otras funciones de manera exclusiva como la seguridad y protección de autoridades y edificios o garantizar el funcionamiento de los servicios públicos. Tiene también otras funciones compartidas con otros cuerpos como es el caso de la seguridad ciudadana y el orden público, con Policía Nacional.