Mikel Alegría Sandúa (Conservas María Jesús): "El bonito es lo que nos diferencia"
Abrimos La Ventana de la Empresa de Navarra a una empresa de Ablitas que lleva casi 40 años en el mundo de las conservas
Pamplona
La Ventana de la Empresa de Navarra nos lleva hasta Ablitas donde encontramos a una familia que lleva cerca de 40 años elaborando conservas de manera artesanal bajo la marca que se conoce ya como Conservas Artesanas María Jesús.
Mikel Alegría Sandúa, tenía 10 años cuando su madre, María Jesús, comenzó a elaborar y vender conservas en 1985. Ahora, 38 años después, las conservas son su "modo de vida", su "forma de ganarse la vida". Explica que la familia de su padre han sido siempre agricultores y han vivido de cerca la recogida de alimentos hasta que decidió dar el salto y pasar de ser "recolector a ser fabricante".
Considera que el producto que les diferencia del resto de empresas de conservas de la zona es el bonito. Fue su madre la que quiso diferenciarse y "empezó a hacer pescado" con la ayuda de visitantes que llegaban de Gipuzkoa. Ahora, "el bonito es el producto que más triunfa" asegura, sin dejar de lado la verdura porque asume que "un madrileño no viene a Ablitas a comprar pescado sino verdura". El bonito ha pasado a ser "una campaña super importante" para la empresa que se dedica de julio a noviembre a la conserva de este producto.
Alegría explica en la ser que la verdura tiene un proceso "más sencillo" y el bonito "es más complicado" pero también les gusta más ya que lo consideran un producto que les ha abierto las puertas a nuevos mercados.
Han sido cerca de 40 años en el sector de las conservas y reconoce que aunque los envases han cambiado, "ahora los interiores las latas tienen unos barnices mejores y producen menos alergias".
Conservas María Jesús, distribuye sus productos en casi todas las comunidades autónomas sobre todo hacen venta a tiendas pequeñas y cuentan también con una tienda en la propia fábrica de Ablitas y un portal de venta online. Los productos también se exportan a países como Francia, Alemania o Estados Unidos donde sobre todo "triunfan los pimientos del piquillo, espárragos y alcachofa".
Durante muchos años la empresa se ha dedicado también a embotar espárragos que llevaban los vecinos y vecinas de la localidad y zonas cercanas pero Alegría dice que "prácticamente no se hace" porque era la gente mayor la que se acercaba y esa tradición "con los jovenes se está perdiendo" ya que prefieren "comida fácil y que se la des hecha".
Así como decidieron en su día apostar por el bonito, la idea de Conservas María Jesús es seguir haciendo "pruebas" de productos que puedan funcionar. Lo hacen en una cocina que tienen en la fábrica y que utilizan a modo de laboratorio. "Ahí estamos todo el día probando" dice Alegría aunque hay cosas que pueden tener buen sabor y la ejecución es "demasiado complicada" y se apuesta por descartarlo. En este sentido, considera por ejemplo que hacen "muy buena legumbre en platos ya cocinados". Lo importante, reconoce, es "que la gente no se canse" y para eso hay que "ofrecer cosas nuevas y renovadas".