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Baloncesto | Deportes

La MVP navarra y su regreso, superando lo soñado, a las pistas once meses después

Irati Etxarri volvía a disputar un partido oficial con su equipo el Spar Girona tras caer lesionado en febrero del año pasado. La ala pívot navarra, internacional absoluta a sus 25 años, no pierde de vista los Juegos Olímpicos en París de este verano

Irati Etxarri y su regreso a las pistas de basket 11 meses después

Pamplona

Las lesiones y más las de larga duración, como la de ligamento cruzado de la rodilla, son sin duda, la parte negativa del deporte. Si encima llega cuando vienes de ser designada MVP nacional de la Liga Femenina de baloncesto, incluida en el quinteto ideal de la competición, fichas por un club de Euroliga y eres internacional absoluta, todavía más. Es el caso de la ala pívot navarra Irati Etxarri que a sus 25 años acaba de regresar a las pistas, once meses después de su grave lesión de rodilla. Lo hizo en Girona ante su público y vivió un momentazo que nos relata en SER Deportivos Navarra.

Irati Etxarri y su regreso a las pistas de basket 11 meses después

Irati confiesa que "el regreso no fue ni siquiera el soñado, fue mejor de lo que me hubiese imaginado nunca. Mi único objetivo era volver a jugar, disfrutarlo y sentirme bien. Lo conseguí así que contenta". Once meses de recuperación por el camino que ha asumido con naturalidad. "Sabemos que estamos expuestas a esto, me tocó a mí pero a muchas compañeras les ha pasado. Ves como finalmente lo superan y vuelven. Al final es un proceso. Nunca quieres que te pase esto pero cuando te pasa en mi caso, lo asumes y ya está. Piensas en las cosas, en el porqué ha podido pasar que hay cosas que ni siquiera dependen de ti, la mayoría de ellas pero en lo que sí que depende de ti pues aprender".

La jugadora navarra es consciente de lo que todavía le queda por delante y apunta que "ahora tengo que ir volviendo a encontrarme a mí misma, también sobre la pista. Algunos me decían lo peor ya ha pasado pero para mí lo más difícil está siendo ahora porque cuando estás lesionado, todavía no estás en competición, estás muy tranquilo porque tú vas haciendo, vas cumpliendo con lo que te dicen y ya está. Paso a paso pero cuando entras en la dinámica de equipo, tienes que rendir con el equipo pero tienes que seguir preocupándote por tu rodilla, hoy tratamiento, descanso, un trabajo específico en el gimnasio. Es como un plus. Esto es muchísimo más exigente, a nivel mental y físico. Ya he jugado tres partidos pero todavía queda y queda lo más difícil".

Respecto a la posibilidad de volver a la selección y poder disputar los Juegos Olímpicos en París este verano, Etxarri reconoce que "no te voy a mentir que está en mente, sabemos que están ahí y es una ilusión poder ir pero no tiene sentido pensar en ello ahora porque si algo tengo claro es que si voy a los Juegos es porque yo estoy bien y para que yo esté bien tengo que cada día ir trabajando para volver a ser o a sentirme yo en esa plenitud de estar bien. Tengo claro que si estoy bien y finalmente Miguel Méndez, el seleccionador, decide llevarme al equipo será porque yo estoy bien y puedo aportar al equipo. Si no estoy así, no voy a ir pero es que tampoco pasa nada. Esto lo tengo grabado a fuego".

Una Irati Etxarri que ha vuelto a recuperar su número 8 de toda la vida en la camiseta pero tampoco ha cambiado mucho más en este tiempo de recuperación. La ala pívot señala que "sigo entendiendo este proceso de la misma forma en la que lo he vivido pero sí que esta perspectiva con el baloncesto y esta obligación a tener que parar porque estás lesionada, te hace coger perspectiva de tu vida. Volver a gestionar mejor tus prioridades, focalizar en otras cosas que me hacen feliz".