"Chicos de 16 años preocupados por el consumo de cannabis": el perfil que atiende el programa Suspertu en Navarra

Proyecto Hombre Navarra ha advertido de los riesgos del consumo de cannabis entre los adolescentes. Se trata de la principal sustancia que motiva la búsqueda de ayuda de las familias que acuden al programa Suspertu que gestiona la entidad. El director del programa, Garikoitz Mendigutxia, ha explicado que se trabaja principalmente con adolescentes con "algún comportamiento de riesgo" que van "más allá del consumo de drogas".

El año pasado, el programa atendió a 103 adolescentes y a 245 familias. Un 68,7% de los adolescentes terminaron el programa de manera satisfactoria, el 86,4% en el caso de los procesos iniciados con las familias. Al programa Suspertu llegan mayoritariamente adolescentes (3 de cada 4) con una edad media de 16,5 años, que conviven con su familia de origen y son estudiantes. Según apunta Mendigutxia, un tercio de las personas que atienden tiene algún tipo de diagnóstico psiquiátrico y presenta alguna incidencia judicial. Además, llegan con un "elevado malestar psicológico, con una autoestima muy baja y bajísima tolerancia a la frustración". Una vez iniciado el programa los profesionales cuentan que detectan un "deterioro en la relación familiar", en alguna ocasión "con episodios de violencia importante".

La entidad ha hecho balance del último año y apunta a que la principal sustancia que motiva la búsqueda de ayuda es el consumo de marihuana, con una alta prevalencia de consumo diario, a lo que se suma otros "comportamientos de riesgo" asociados al consumo de drogas como robos o prácticas sexuales de riesgo. Entre los indicadores que detectan la afección que tiene el consumo de estas sustancias en los jóvenes está según Mendigutxia "un descenso del rendimiento académico, conflictividad familiar, absentismo o abandono de actividades de ocio".

Este último año han puesto el foco también en la "normalización del consumo de marihuana" ya que consideran que ni los jóvenes ni las propias familias son conscientes de los efectos que tiene este consumo en el comportamiento de los adolescentes. Una vez pasan por el programa Suspertu, asegura su director que quienes lo terminan "se van con una mejora significativa en todas las áreas, tanto a nivel personal, en el ámbito familiar y escolar, y con un abandono o reducción en el consumo de marihuana y el resto de comportamientos de riesgo".