Trasa, pionera en el máximo aprovechamiento de vegetales
La empresa de Milagro fabrica piensos a partir de los restos de verduras y legumbres que no se aprovechan para consumo humano
Trasa: La economía circular aplicada los productos del campo
Pamplona
Alrededor de la mitad de muchos productos del campo destinados al consumo humano se acaba desperdiciando. Lo podemos ver en nuestras casas a la hora de limpiar muchas verduras y prepararlas para su consumo. Ocurre al pelar las alcachofas, unos espárragos o limpiar un cardo. El desperdicio es abundante. Y esos restos siguen manteniendo sus cualidades nutricionales aunque sean menos atractivos para lograr la exquisitez del plato que pretendemos elaborar. El mercado no tiene miramientos con las verduras que se salen de los estándares establecidos para el consumo y que no resultan atractivas a los ojos de los compradores y es un "dolor" ver como se desechan muchos vegetales por ese motivo. Es la idea que expresa José Ramón Íñigo, gerente de la empresa navarra Trasa, Tratamiento de Subproductos Agroalimentarios S.A., ubicada en la localidad de Milagro. "Eso que no vale para la alimentación humana puede ser un recurso para otro tipo de alimentos", en este caso destinados a los animales a través de piensos.
"Los animales tienen unas necesidades nutricionales y no comen como nosotros, los humanos, lo que les apetece sino lo que necesitan". El subproducto vegetal es todo el resto de producción de la industria que vale para la alimentación y que tiene que cumplir una casuística de seguridad alimentaria, de trazabilidad, es decir, que tengamos la seguridad de que es apto para la alimentación. Si cumple con esos requisitos, es un subproducto. Si no cumple, es un residuo", diferencia Íñigo.
Uno de los productos paradigmáticos en este empleo de los subproductos vegetales es el brócoli. "Mediante un proceso de I+D tenemos un desarrollo industrial por el que obtenemos unas partículas que hacen de esta verdura un 'superalimento'. Somos capaces de obtener ese ingrediente, encapsularlo y darlo a la alimentación humana para poder obtener esos beneficios potenciando además su absorción". Dice Íñigo que es un caso de "valorización muy claro con un producto de alto valor añadido". Pero la actividad de Trasa se centra en la investigación con una gama variada de verduras y legumbres, las que se producen en el entorno del Valle del Ebro. No en vano, este proyecto empresarial nace en el seno de la asociación ALINAR, Asociación de Industrias Agroalimentarias de Navarra, Aragón y La Rioja, y Trasa trabaja con empresas de esas comunidades.
La investigación y la innovación están en la raíz de Trasa; "es un proyecto que no se podía copiar de nadie porque nadie tenía la información de cómo llegar a donde estamos ahora. Partimos de un barrido completo de lo que había en el sector, y a partir de esos estudios canalizamos distintas opciones". Y la primera de ellas fue la planta de Milagro con 30.000 metros cuadrados, oficinas y laboratorios propios y una fábrica de piensos para rumiantes a partir de restos vegetales. Tenemos un departamento de I+D con personal propio para desarrollar nuevos productos y otras vías de valorización. Una de esas vías es la insecticultura. En el laboratorio han conseguido engordar larvas de mosca soldado negra para la alimentación de animales de corral o en piscifactoría. A través de una sociedad creada al efecto, "ya están criando y engordando larvas en cantidades suficientes" para ese propósito. Por ejemplo para gallinas ponedoras. "Estamos obteniendo resultados muy buenos en beneficios para los criadores, con huevos grandes de cascara muy dura, y yemas y claras densas".
En cuanto a la alimentación para rumiantes, se trata de una comida en húmedo cuyo conste de transporte hoy lleva a vender en cercanía "dentro de la zona norte de España, desde Cantabria hasta Madrid o Cuenca. En distancias más largas, el transporte nos penaliza bastante", apunta.
El gerente de Trasa explica que el trabajo de su empresa es una muestra de "economía circular pura y dura. Revertir todo lo que se produce en el campo a la alimentación humana de una forma u otra". Lo que no comen los consumidores directamente en la mesa, lo comen los animales que luego alimentan a las personas. "Y con lo que no vale para nada somos capaces de crear abono para el campo. No se desperdicia nada", concluye.
Sigue el canal de la SER en WhatsApp
Encontrarás toda la información, el deporte y el entretenimiento: la actualidad del día y las noticias de última hora, los mejores vídeos y momentos de la radio, entrevistas, reportajes y mucho más.