Navarra dejará de atender psicológicamente a las víctimas de abusos sexuales de la Iglesia que superen las 32 sesiones terapéuticas
Esta decisión afecta a los cuatro denunciantes de abusos sexuales en la Iglesia católica que todavía reciben esta atención por las secuelas que padecen décadas después de sufrirlos. Ahora, tendrán que acudir a la red de Salud Mental
Pamplona
Según ha podido saber la Cadena SER, la Oficina de Atención a Víctimas del Gobierno de Navarra va a dejar de atender psicológicamente a los denunciantes de abusos sexuales en el seno de la iglesia católica que todavía reciben estas sesiones. Son tan solo cuatro personas que, a partir de ahora, tendrán que acudir a la red de Salud Mental. La noticia ha caído como un jarro de agua fría sobre los denunciantes. Uno de ellos es José Luis Pérez, que lamenta los efectos que puede tener en ellos el dejar de recibir este servicio y, sobre todo, el dejar de ser atendidos por Josean Echauri, psicólogo del PSIMAE, para el que solo tiene palabras de agradecimiento: "Para nosotros la verdad es que ha sido una noticia muy mala. Yo al principio no me lo podía creer. Yo decía, bueno esto será alguna otra cosa, nos faltará información. Luego lo supimos por Josean Echauri, nuestro psicólogo maravilloso, que nos ha salvado la vida de alguna manera a muchos. Pues, supimos por él que sí, que desde Justicia le habían dicho que esto se acababa, que ya no tenemos más consultas, más terapias, con él. No sabemos por qué. Nadie ha levantado un teléfono para avisarnos ni decirnos nada. Nos hemos disgustado bastante porque para nosotros esto es y ha sido importantísimo en nuestras vidas". En la misma línea, Jesús Zudaire, presidente de AVA (Asociación de Víctimas de Abusos), ha explicado lo que supone para él este cambio: "Me ha ayudado mucho. Él me diagnosticó el shock postraumático y me ha hecho un montón de evaluaciones que han dado como resultado que muchos de los problemas que he sufrido en la vida han sido consecuencia de los abusos que sufrí desde los 7 hasta los 14 años. Entonces, es un palo, es un palo gordo". Esta decisión se amplía también al resto de víctimas de delitos graves, que tendrán un límite de sesiones terapéuticas.
El hecho de que tengan que acudir a la red de Salud Mental se traducirá, previsiblemente, en que las sesiones se espaciarán más en el tiempo. Ahora acuden a consulta una vez al mes o cada tres semanas. Igual que ellos, hay otras víctimas de delitos graves que están cronificadas y que reciben esta atención pública. Sin embargo, suponen un porcentaje muy reducido de los casos que atienden desde la Oficina de Víctimas del Gobierno de Navarra, por lo que no entienden qué diferencia puede suponer para las arcas públicas el seguir atendiéndoles.
Respuesta del Gobierno de Navarra
Desde el Gobierno de Navarra han hecho llegar un texto en el que explican que "se está haciendo una modificación en el pliego de la atención a víctimas y agresores para igualar a todas las personas víctimas de delitos graves y menos graves y aumentar el alcance de este servicio público, llegando a mayor población". En concreto, van a fijar un límite en el número de sesiones que pueden percibir las víctimas de delitos graves -no solo las que sufrieron abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica-: hasta 32 sesiones máximo en personas adultas víctimas de delitos graves y 35 en menores.
Sobre la decisión de dar el alta (no es el alta terapéutica) a los cuatro denunciantes de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica que reciben esta atención en la actualidad, han argumentado que "se intenta acompañar a las víctimas durante el mayor tiempo posible, pero hay que atender a otras víctimas a las que no se está llegando en este momento". Estas cuatro personas han recibido una intervención terapéutica, argumentan, de entre 4 y 5 años de terapia y seguirán teniendo "a su disposición el servicio de justicia restaurativa". Asimismo han subrayado que se ha aumentado la partida de atención psicológica a víctimas y agresores en 110.000 euros, hasta los 560.000 euros.
Hora 14 Navarra