"El mañana es nuestro"
Hoy se cumple un año desde que comenzaran las primeras protestas en Siria, la llamada primavera árabe que comenzó en Túnez y que se extendió a Egipto, Libia, Yemen, Bahréin y también Siria continúa. Hoy se cifra en 8.000 los muertos por las protestas contra el régimen de Basad Al Assad
El balance de víctimas en Siria es muy amplio, 8.000 muertos, 30.000 exiliados y 200.000 desplazados al interior. La economía está hundida por las sanciones internacionales y Naciones Unidas se muestra como un actor secundario que no termina de tomar partido.
Más información
Ahmed es ciudadano sirio, está en Damasco y es opositor al régimen, los malos tratos y el uso de la fuerza militar con los civiles es una constante "los manifestantes salen a la calle para morir o para ir a la cárcel". Homs es una de las ciudades más castigadas, es la tercera más grande del país y por ello hay mucho movimientos en las calles, "el gobierno no quiere manifestantes, hace tres días la matanza fue contra mujeres y niños". Ahmed cuenta que no sale a la calle "vivimos debajo de la tierra, cada día cambiamos de casa, la policía nos busca uno por uno". La policía entre en las casas y las destruye buscando a los civiles contrarios al régimen.
Noemí Ramírez, Investigadora Especializada en Siria dice que la Comunidad internacional está de acuerdo con que Siria se enquiste y se debilite y a partir de ahí pueda ser dominada. "Se compara mucho con el Libia, Es muy diferente ser rebelde y ser revolucionario" la revolución implica un cambio más amplio que tumbar un régimen". Para Noemí el régimen está empujando a la población a la guerra civil para continuar en el poder.
El bloguero Yassin Sweat dice que clima de violencia desatada saca lo peor de casa sociedad. "a ambas partes de los conflictos regionales les interesa que se convierta en un campo de batalla". "Pensé que no se repetiría. Cuando respondes a la palabra con balas, ya sabes lo que va a pasar". Los sirios saben que están muy solos, que la Comunidad Internacional está inoperante, "si 8.000 muertos sirios cuestan que un embajador no vaya a un almuerzo...somos los huérfanos de este mundo". Quieren terminar con el régimen que los somete, luchan con ese objetivo y lo trasmiten al mundo "cuando hablo con los que están allí ellos me dicen "el mañana es nuestro".