Música ecléctica para reciclar la infancia

Madrid

Hace ocho años, el gestor medioambiental Favio Chávez decidió sacar provecho del vertedero de Cateura, junto al que vivía y en el que trabajaban los niños del barrio aledaño buscando y vendiendo escombros. Lo que entonces no sabían los habitantes de esta colonia de Asunción, en Paraguay, es que su idea acabaría dando la vuelta al mundo. Después de que decenas de niños fabricaran violines, saxofones y contrabajos a partir de lo que encontraban en el basurero y de que aprendieran a interpretarlos, la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura acaba de finalizar una breve gira por España, donde ha interpretado un repertorio en el que caben desde los Beatles hasta Beethoven.

 "En el mundo de la música hablamos de superación y se nos olvida el esfuerzo que tienen que hacer quienes parten de la pobreza", cuenta Miguel Poveda, el cantaor que actuó junto a 24 delegados de la orquesta, el pasado 28 de diciembre en el barcelonés Palau de la Música. Su anfitrión en Madrid, el pasado 4 de enero, fue Raphael. El pasado marzo, esta banda de adolescentes de entre 11 y 22 años también acompañó a Metallica durante su gira por Latinoamérica.

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A pesar de haber conocido el triunfo, y aunque la Escuela de Música de Cateura, sustentada con la recaudación de esta orquesta, anticipa un futuro con instrumentos convencionales, el carácter humanitario de la banda permanecerá. Más allá de seguir creando músicos y formando como lutieres a los empleados del vertedero, la intención del grupo es financiar viviendas y prestaciones sociales en el barrio. No es que en Cateura acaben de descubrir el reciclaje, ya que las puertas y contraventanas de muchas de sus casas están construidas con chapas y cartones; pero sí es la música quien está cambiado una colonia en la que un violín es mucho más caro que una vivienda.