La cara política del deporte base
Los clubes más modestos van a la huelga este finde semana en protesta a la pretensión del Gobierno de obligarles a dar de alta en la Seguridad Social a todas aquellas personas que reciban una remuneración por su función. Hemos hablado con una diputada de CIU y un diputado del PSOE que están en contra de esta medida porque consideran que perjudica a los más modestos
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Madrid
El deporte base está en guerra contra el Gobierno. El motivo es que quieren obligar a los clubes más modestos a dar de alta en la Seguridad Social a todas las personas que colaboran con ellos y perciban una cantidad de dinero por encima de los 200 euros. Este fin de semana el fútbol, en sus categorías inferiores, está en huelga. Las federaciones de Asturias, Euskadi, Cantabria, La Rioja, Extremadura, Castilla y León, Ceuta, Melilla y Canarias paran en protesta a una medida que podría hacer desparecer a los más modestos.
En este caso, el deporte muestra también su cara política. Es, precisamente, una nueva legislación la que les ha puesto en alerta. El Gobierno cree que de esta manera se puede evitar el fraude, la oposición les pide sentido común. Carme Sayós, diputada de CIU, afirma que se debe dar de alta a quienes tienen una relación laboral con el club. Asegura que con esta medida "incluso las AMPAS de los colegios tendrían que dar de alta a los monitores que realizan actividades extraescolares" como entrenar a niños. El PSOE también está en contra. El diputado Manuel Pezzi pide "una mejora jurídica para el voluntario. Algo qué defina su tipo de contrato".
Los clubes más modestos temen que esta normativa salga adelante porque muchos se verían abocados a la desaparición. La mayoría solicita una regulación propia y específica para el deporte aficionado contemplando sus peculiaridades.
