"Todavía hay una posibilidad de estabilizar Libia"

Madrid

"Todavia hay una posibilidad de estabilizar el país, aunque tenemos en contra muchos aspectos: económicos, políticos y de seguridad". Así se ha manifestado el representante especial de Naciones Unidas para Libia, Bernardino León. Unas palabras que, no obstante, contrastan con su descripción del país. "La situación económica está al límite, también lo está la seguridad", y concluye "es un caos total".

Hablamos con Bernardino León cuando se cumplen cuatro años del alzamiento en Libia que terminó con el régimen de Gadafi. Cuatro años después, este país, a las puertas de Europa, es un estado fallido al borde de la guerra civil, con un gobierno rebelde en Trípoli y con otro en Toubruk -que es el que reconoce la Comunidad Internacional-. Y ese caos ha convertido a Libia en terreno abonado para los planes de expansión del fanatismo yihadista. Muestra de ello es el asesinato de 21 egipcios cristianos coptos que fueron degollados por los terroristas, que grabaron su barbarie en un vídeo en la costa de Trípoli. El Cairo ha respondido ya con bombas sobre algunos puntos controlados por el Estado Islámico, a la espera -dice Egipto- de un respaldo internacional que le permita ir a más.

Bernardino León señala que hay que actuar de manera coordinada para evitar que los yihadistas extiendan su control a este país. "Lo importante ahora es que haya coordinación internacional y que la preocuiación se convierta en un impulso", dice.

Si la situación continúa deteriorándose y las conversaciones no llegan a buen puerto León no descarta algún tipo de intervención. "Todos compartimos que una intervención militar no acordada con los principales actores libios genera una incertidumbre, unos riesgos importantes y habrá que valorarlos pero, si se empeñan en prolongar la guerra civil tendremos que tomar medidas que serán difíciles. No se puede dejar el país sumido en el caos con el riego que lleva también para sus vecinos."