¿Cómo era aquello de la mujer del César?
El Consejo General del Poder Judicial ha nombrado a Fernando de Rosa como nuevo presidente de la Audiencia Provincial de Valencia en sustitución de Carmen Llombart
Madrid
¿Verdad que todo el mundo entiende que tu hermano mayor, un compañero de trabajo, un antiguo novio, un subordinado tuyo si has mandado algún día, no puede ser el juez que te toque en un sorteo, como si los magistrados salieran del bombo del Gordo, que los niños de San Ildefonso sacan el 13437 y ahí te quedas?
Pues aquí los jefes de los jueces eligen para juzgarte, precisamente, a tu novia, a tu primo o, como ahora mismo verán, a tu empleado. Creen estos señores –y otros que han contribuido al descrédito generalizado de las instituciones- que los ciudadanos vamos a callar siempre. Pues olvídenlo. Oigan con atención, que hoy no solo recojo frase, sino hasta párrafo: “El Pleno del Consejo General del Poder Judicial ha elegido al magistrado Fernando de Rosa, ex consejero de la Generalitat Valenciana con Francisco Camps, como nuevo presidente de la Audiencia de Valencia que en los próximos meses deberá juzgar al equipo del PP de Francisco Camps por varios delitos de corrupción, entre ellos los relacionados con el caso Gürtel”. 16 de los 21 jueces han votado que sí, que está muy bien que un militante del PP, amigo personal de Camps, al que afilió al partido, y conmilitón de los demás acusados sea quien juzgue su caso.
Elijan ustedes: ¿Desvergüenza, desfachatez, impudicia, indignidad? ¿Y qué tal indecencia?
