"¿Dónde está Europa frente a esa gente que está muriendo a su puerta?"

Madrid

La primera cosa es tomar conciencia de que lo que está ocurriendo no es coyuntural. Estamos en esta situación desde hace ahora 30 años. Repito: 30 años. Y necesitamos una gran política migratoria desde Europa. Esa gran política basada en dos pilares: el primer pilar es, hoy en día, crear una fuerza en Europa más allá de la fuerza existente de Fróntex, que controla el Mediterráneo. Una fuerza que no sea solamente policial, sino también una fuerza que trabaje con las autoridades tunecinas, libias... porque de estos dos países y, sobre todo, desde Libia, están saliendo estos inmigrantes. Hay que ponerse de acuerdo con los dos gobiernos de Libia para crear esa fuerza, un cinturón para poder estabilizar estas poblaciones, meterlas no en centros de detención, sino de acogida y crear las condiciones para que esas personas puedan volver a su país. Si no es posible para los refugiados, sobre todo los refugiados políticos que provienen de Siria y de Irak, que están pasando también por estos caminos, hay que responder a su demanda humanitaria y acogerlos. Lo digo claramente: no hay otra solución. Y la segunda política es elaborar una estrategia a largo plazo que sea basada en la ayuda al desarrollo de las regiones de donde proceden estos inmigrantes. Y tenemos, lo repito, que aumentar el número de gente que recibimos, porque la demanda va a seguir y Europa tiene que afrontar ese desafío. Lo hemos hecho con los países del Este, yo no veo por qué no hacerlo con los subsaharianos o con los refugiados iraquíes y sirios. Y tenemos además una responsabilidad mucho más importante con ellos. Es una tragedia humanitaria, no es solamente una demanda migratoria.

Porque Europa no existe, no hay identidad europea común, no hay sentimientos comunes, no hay política común en cualquier sector que no tiene que ver directamente con los intereses económicos. Europa es solamente un mercado, una moneda, una visión estrictamente monetarista del mundo. No hay corazón, no hay visión, no hay absolutamente nada y por eso hay un desengaño frente la Constitución Europea. Pero el problema es que estamos en una situación en la que cada día muere gente: niños, mujeres... y son como nosotros. No veo blancos, o negros o amarillos. Son seres humanos que están muriendo, pidiendo ayuda, pagando, explotados. Hay que ver las mujeres dónde están, como se portan con ellas estas mafias yihadistas y de gamberros mafiosos que mueven todo este comercio. Es la barbaridad más increíble. Y Europa, ¿dónde está la Europa ilustrada frente a esa gente que está muriendo a su puerta?