A Josep Antoni Duran i Lleida

Madrid

Señor presidente de Unió Democrática de Catalunya, la ruptura de la federación que formaba junto a la Convergencia pujolista saca del Govern de la Generalitat de Artur Mas a los tres consellers de obediencia democristiana. La causa desencadenante es el ultimátum en torno a la asunción incondicional del independentismo, cara a las elecciones plebiscitarias imaginadas para el próximo 27 de septiembre. Rehúye así el abismo, conforme a la templanza de su trayectoria. Intenta una separación civilizada pero, como en los divorcios de las parejas, el diablo está en los detalles. Veremos.