Un permanente que pasará

Madrid

Cinco equipos españoles en la Champions son una carga fantástica de ilusión pero también de preocupación. Porque anoche el Barça, aun ganando en ese arreón de dos aciertos en los últimos minutos, tuvo una noche aciaga en la que jugó bajo el síndrome de orfandad que le produce jugar sin Messi y que se agravó quizá más cuando se lesionó Iniesta, lo que le complica más el futuro a Luis Enrique –que, imitando a Mourinho, ha prohibido a los periodistas que compren sus billetes en el avión que utiliza el Barça. Con lo que ahora, los periodistas catalanes, que por cierto, nunca fueron dudosos de su apoyo al Barça, habrán de desplazarse y regresar como puedan. Igual que los de Madrid.

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Esos detalles siempre se producen en época de malos resultados y suelen deteriorar el ambiente y la relación con la prensa. Recupera terreno el Valencia ganando anoche en Lyon y quedamos a la espera de lo que haga el Madrid esta noche en Malmö, el Sevilla en Turín frente a la Juve y el Atletic en Madrid con el Benfica.

Pero a mí particularmente me preocupa especialmente lo que decida hacer el juez con el testimonio de ese testigo protegido que ha señalado a los asesinos de Jimmy, el seguidor del Dépor, asesinado en Madrid hace ahora un año.