A Artur Mas | 15-10-2015
Líder de Convergencia

Madrid
Molt Honorable President en funciones de la Generalitat y aspirante problemático a la reválida de la investidura pendiente de la CUP, versión modernizada del anarquismo, su comparecencia ante el Tribunal Superior responde a una cita que ha de ser atendida. Las decisiones judiciales son criticables pero han de cumplirse. En democracia nadie, ni siquiera los elegidos en las urnas, queda por encima de las leyes. Así sucede también con los titulares del ejecutivo catalán. Los acompañamientos sobran. La asunción de responsabilidades es honrosa.




