De epopeya a sainete
De golpe y porrazo, Convergencia descubre que le falta músculo para culminar el proceso, pero lo descubre porque Artur Mas no logra la investidura. No puede considerarse una sorpresa la exigencia de la CUP, la había expresado en voz alta desde el primer día
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Madrid
Con los amagos de viraje de Convergencia la situación en Cataluña puede pasar de epopeya a sainete para desconcierto de todos. De golpe y porrazo, Convergencia descubre que le falta músculo para culminar el proceso, pero lo descubre porque Artur Mas no logra la investidura. ¿Quiere decir que si la hubiera logrado el proceso hubiera tenido músculo? Hasta ese momento la hoja de ruta hacia la independencia les parecía a todos la Biblia. No puede considerarse una sorpresa la exigencia de la CUP, la había expresado en voz alta desde el primer día.
Cuesta mucho creer que gente de la talla de Mas-Colell, por ejemplo, no tuviera muy claro hasta anteayer lo que nos resultaba evidente a los que no le llegamos a la suela del zapato. Todo en Convergencia transmite ahora una sensación de amateurismo inexplicable en un partido de su solera, o de naufragio. Pero a algunos simples observadores nos va a costar bastante volver a tomarlo en serio. ¿Qué debe estar pasando ahora en Cataluña? Me interesaría mucho saber cuál es el efecto de este electroshock en Cataluña y en los catalanes, y en su orgullo.