El avión solar que cruza el Pacífico

Bertrand Piccard, psiquiatra y explorador, y André Borschberg, ingeniero y empresario, han demostrado la eficiencia de la tecnología fotovoltaica aplicada a la aviación, y que la idea nacida en Suiza sigue avanzando. Esta madrugada Piccard, el piloto que ha volado, completó la novena travesía del 'Solar Impulse I', uniendo Hawai y California en dos días y 14 horas y media, tras atravesar el océano Pacífico.

Antes de este último viaje, y tras nueve meses de parada técnica por problemas en las baterías, ya se demostró que es capaz de volar cinco días y cinco noches sin parar, al unir los 8.900 kilómetros que unen Japón con Hawai. El 'Impulse' es capaz de volar de día, propulsado por células solares en sus alas, y por la noche se mantiene en el aire con la carga de sus baterías. Los días más largos en el Hemisferio Norte durante esta época, con suficientes horas de sol para cargar las baterías, le permiten hacer vuelos más largos. Por lo tanto, su autonomía es casi ilimitada.

Como dice su lema, el futuro debe ser limpio. El proyecto Solar Impulse fue desarrollado por los pilotos profesionales Piccard y Borschberg en 2004 para minimizar el consumo energético, utilizando materiales ligeros para reducir su peso, por lo que solo puede ser tripulado por una persona. El próximo reto que tienen será conseguir ser la primera nave de este tipo en dar la vuelta al mundo.