Defensores de los derechos humanos

Madrid

Ivannia María López Padgett es abogada y defensora de los derechos humanos en Honduras. Durante cinco años, entre 2004 y 2009, fue ayudante del fiscal de Talanga, 60 kilómetros al norte de Tegucigalpa. López Padgett dimitió de su cargo cuando le pidieron “dos o tres veces” que resolviera un caso “de una u otra manera”. Meses después de renunciar a su cargo fue nombrada coordinadora del Programa de Prevención y Atención a la Violencia contra las Mujeres en el Centro de Derechos de Mujeres (CDM). Como coordinadora de este programa, participó como acusadora privada en casos de violencia doméstica, intrafamiliar y sexual. A pesar de haber recibido amenazas durante toda su vida profesional, especialmente cuando trabajó en la fiscalía, fue su defensa de los derechos de las mujeres la que desembocó en su solicitud de asilo en España.

En Honduras 531 mujeres fueron asesinadas el año pasado. El 95% de estos asesinatos quedan impunes. Defender los derechos de las mujeres hondureñas es un riesgo

El 3 de febrero de 2010 Vanessa Zepeda, una enfermera de 29 años y madre de tres hijos, salió de su casa para hacer unos recados. Horas más tarde fue hallada sin vida sobre una carretera de tierra a orillas de un solar baldío en una colonia de la capital. Llevaba las zapatillas deportivas nuevas que se acababa de comprar. Todas sus pertenencias estaban consigo. Había sido estrangulada. En un primer momento se relacionó la muerte de Zepeda con su pertenencia a un sindicato. La oposición al Gobierno del presidente Juan Orlando Hernández señaló directamente al Estrado como culpable en la muerte de la joven sindicalista. Pero su madre tenía otra opinión. López Padgett, como abogada del CDM ejerció la acusación particular en el asesinato de Zepeda.

Varios testigos aseguraron haber visto a un hombre trigueño, de cabello oscuro y bien vestido, bajar de su turismo color champagne, abrir la puerta del copiloto, tomar el cuerpo de Vanessa y dejarlo en la carretera, antes de huir. En 2011, el médico Rafael Sierra, pareja de Vanesa y padre de dos de sus hijos, fue condenado aunque el proceso se dilató cinco años por los recursos presentados por la defensa. Sin embargo, el médico todavía no ha ingresado en la cárcel. Recibió un chivatazo y actualmente se encuentra prófugo.

En los 4 años que duró el juicio de Vanesa la situación de la abogada se enturbió. En los meses siguientes dos hermanos de Ivannia fueron secuestrados y asesinados. Sin embargo, los altos niveles de violencia de Honduras no hicieron sospechar a Ivannia sobre la relación entre esas muertes y el caso de Vanesa. Ni siquiera cuando logró sobrevivir a un intento de secuestro. Logró refugiarse en casa de su madre. Aunque tampoco entonces vio el nexo con el caso de Vanesa. Fue un mes después, cuando descubrió una nota en el parabrisas del coche.

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El día que Ivannia fue amenazada se fue para no volver nunca. No sabe quien intentó secuestrarla, aunque sospecha de los abogados del médico que asesinó a Vanesa. El 15 de septiembre de 2016 expira su periodo de acogida de Amnistia Internacional.

HERNANDO VALENCIA

Hernando Valencia era profesor de Derecho en la Universidad de Colombia. En 1993 aceptó un cargo en el Estado colombiano como defensor de Derechos Humanos. Su trabajo consistía en investigar y sancionar a los funcionarios públicos sospechosos de haber violado estos derechos.

Al principio todo fue bien, mientras indagó entre soldados, policías y otros mandos de baja jerarquía. “Cuando me metí con un coronel ya se me pusieron las cosas complicadas. Y cuando me metí con un general se me vino el país encima”, cuenta Valencia. Hernando Valencia tuvo que abandonar Colombia y paso los últimos seis meses en el país con varios guardaespaldas, sufriendo amenzas constantes.