El escándalo del ministro del Interior llega al Supremo
No es posible que un ministro, como relata con detalle la querella, se haya dedicado a provocar, posibilitar, facilitar y favorecer la comisión de delitos
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EL OJO IZQUIERDO: 'El escándalo del ministro del Interior llega al Supremo'
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Madrid
Van a permitir ustedes a este vetusto Ojo, que aún anda recuperándose del agotador trabajo de veranear, que haga un pequeño paréntesis entre sáncheces y rajoyes para dedicarle su tiempo a un asunto que no se merece quedar sepultado entre la montaña de periódicos o similares, todos ellos dedicados en exclusiva a dar caña al secretario general socialista. Se trata de la querella presentada ante el Tribunal Supremo por Convergencia Democrática de Catalunya, y el ex alcalde de Barcelona, Xavier Trías, contra el ministro del Interior, el inefable Jorge Fernández-Díaz.
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La lectura de la querella, pueden leerla en el diario Público, pone los pelos de punta. De comprobarse las acusaciones allí vertidas, y hablamos de un partido que tiene ocho diputados en el Parlamento español, nos encontraríamos ante un escándalo de proporciones, y no exageramos, descomunales. No es posible que un ministro, como relata con detalle la querella, se haya dedicado a provocar, posibilitar, facilitar y favorecer la comisión de delitos. El montaje contra políticos catalanes, amplificado después por la prensa a sueldo, es un hecho de tal gravedad que exige respuestas claras e inmediatas.
El PSOE ya pidió una comisión de investigación en el Congreso, pero ahí tenemos, escondido en el silencio y arropado por su presidente, a un ministro del Interior que sigue en su puesto sin decir ni mu.
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