La izquierda se reorganiza
De cómo resuelvan el PSOE por su lado y Podemos por el suyo sus procesos internos, dependerá que en España exista más temprano que tarde una alternativa de gobierno al PP

Madrid
Patxi López lo va a intentar. En mayo serán las primarias y en junio el Congreso, con los que los socialistas intentarán sobreponerse al desastre de octubre y la pérdida constante de apoyo electoral. Y el primero en salir al ruedo ha sido el ex-Lendakari vasco. Se espera que Susana Díaz anuncie sus intenciones en las próximas semanas y ahora ya con un candidato en campaña no puede permitirse esperar mucho. La incógnita todavía es que hará Pedro Sánchez, ahora que le ha tomado la delantera alguien que formó parte de su equipo.
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La dramática guerra de familia que hemos visto en los últimos meses tendrá que despejarse en las urnas internas. Y de cómo conduzcan la inevitable confrontación que tienen por delante se podrán sacar conclusiones de hasta qué punto son todos conscientes de la gravísima situación en la que está un partido que ha gobernado España durante 21 años. López ha descartado ya un acuerdo previo con Díaz que evite las primarias, anuncia que quiere ir hasta el final, para que los militantes voten. Y si es así... ¿Veremos solo una guerra sin cuartel por cuotas de poder entre clanes? ¿O escucharemos un debate sobre las personas pero también sobre las ideas?
Porque el PSOE afronta no solo una crisis interna de liderazgo, con dificultades para captar y ofrecer referentes sociales más allá de los hijos del aparato del partido, sino también una gravísima crisis de credibilidad general. ¿Puede la socialdemocracia clásica volver a entusiasmar a una mayoría de votantes? ¿Puede ofrecer un programa nítido que lo diferencie de la política económica única aplicada en la zona euro desde el año 2000 y que sirva en el mundo del 2017?
Por cierto, sería deseable que esa confrontación de ideas no rehúya el debate en los medios de comunicación y veamos a los candidatos, los que sean, debatir como vimos la semana pasada en televisión a los 7 candidatos socialistas franceses a sus primarias.
Debate en los medios deseable también entre los distintos sectores de Podemos que al comienzo de este fin de semana han presentado sus propuestas para Vistalegre II con diagnósticos y hojas de rutas bien diferenciadas entre el partido de los activistas que quiere Iglesias y el partido de la política en las instituciones que defiende Errejón. En apenas unos meses, la formación morada ha dilapidado buena parte del crédito que acumuló en solo dos años y es crucial para ellos una asamblea general a la que acuden divididos y donde se juegan si serán determinantes o irrelevantes en los próximos años.
Después del interminable ciclo electoral que acabamos de cerrar en España, es bastante comprensible que produzca cansancio y fatiga… el larguísimo ciclo de definición interna que inician ahora los partidos. Pero de cómo resuelvan el PSOE por su lado y Podemos por el suyo sus procesos internos, dependerá que en España exista más temprano que tarde una alternativa de gobierno al PP.




