Convergencia, como el PP
Es necesario aclarar si el partido hegemónico tantos años en Cataluña compitió con el resto con la ventaja de una financiación irregular. Imitar al PP en la falta de explicaciones políticas no parece la promesa de un mundo mejor para los catalanes
La Opinión de Pepa Bueno
02:20
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1488179629_939257/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Madrid
A las diez de la mañana se inicia en el Tribunal Supremo el juicio al portavoz en el Congreso de la antigua convergencia, hoy Partido demócrata catalán, por la consulta del 9 de noviembre de 2014. La consulta había sido suspendida por el Tribunal Constitucional y él era entonces consejero de la presidencia de la Generalitat. Se piden 9 años de inhabilitación para Homs en el primer juicio que se celebra en el alto tribunal por una causa relacionada con el desafío unilateral catalán. Así que nos disponemos a vivir otra jornada de puesta en escena del martirologio nacionalista.
Más información
No vamos a insistir de nuevo, en la necesidad de que la política tome las riendas de este problema político, no vamos a insister en que sólo la política encontrará el camino para salvar del callejón sin salida al que han llevado a los catalanes. Callejón que sirve de escenario a la escalada verbal a la que parece haberse abonado Convergencia.
Homs llegó a decir que si hay condena se acabará el Estado español. Pero esa escalada verbal choca contra la realidad de la solidez del Estado español, esa escalada verbal no arregla nada, sino que encona un poco más las relaciones ...y esa escalada suena más bien a pre-campaña electoral para los comicios autonómicos que se podrían convocar en otoño próximo en Cataluña.
Y mientras, escondiéndose tras la pantalla de la conspiración contra el Procés, se ahorran las explicaciones políticas sobre la investigación de la presunta financiación ilegal de Convergencia, que avanza en los tribunales, con revelaciones que supuestamente señalan al propio Artur Mas. Anoche, Mas puso la mano en el fuego por el tesorero de Convergencia Andreu Viloca.
Es curioso que pretendan conducir a los catalanes a un hipotético lugar donde todos los problemas se resolverían como por arte de magia, sin aclarar una cuestión básica de la democracia: si el partido hegemónico tantos años en Cataluña compitió con el resto con la ventaja de una financiación irregular. Imitar al PP en la falta de explicaciones políticas no parece la promesa de un mundo mejor para los catalanes.