Caminar no es sólo andar
Bru Rovira reflexiona junto a varias personas a las que caminar les ha cambiado la vida
Madrid
Salir de casa y echar andar. Es inherente al ser humano, una consecuencia de la bipedestación. Pero caminar es mucho más. Al caminar se observa, se piensa y, sobre todo, se es libre. De hecho, hasta mediados del siglo XX a las mujeres no les estaba permitido andar solas, o estaba mal visto. Eso de andar sin compañía era cosa de prostitutas.
Bru Rovira ha dialogado esta semana con caminantes. Julián es uno de ellos. Leonés. Ahora está jubilado, pero fue charcutero toda su vida, no se movió más allá de los 5 metros cuadrados de su puesto. Cuando se jubiló y su campo de acción se abrió, se hizo adicto a caminar. Otra, Rosa Moliner, tarraconense, ha hecho el Camino de Santiago 7 veces. Hemos hablado con Alejandro Rojo, su zapatero, que nos ha contado las rutinas en cuanto a calzado de Rosa. Y, por último Paco Contreras, o 'SuperPaco'. Con 60 años le dijeron que tenía alto el colesterol y comenzó a caminar. Ahora, con 79 es un experto en hacer ultramaratones de 100 kilómetros.
Y, además también hemos conocido a un grupo de jubilados que se junta para caminar una vez en semana. Leonardo Hernández es el promotor de Conocer Madrid Martes y Los arbolatas, con los que ha realizado más de 200 rutas por los alrededores de la capital.
Esta semana en A vivir hablamos de hacer camino con Bru Rovira y con Pere Ortín, periodista, director de la revista Altaïr, que dedica este més un monográfico a la cuestión titulado 'El arte de caminar'.
Carreteras secundarias (13/05/2017) - Caminar no es sólo andar
19:27
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