Argumentos a favor y en contra de los transgénicos
El doctor en Bioquímica y Biología Molecular, José Manuel Mulet, desmiente algunos mitos sobre los productos alterados por ingeniería genética
Madrid
Los productos transgénicos suelen estar, a menudo, en el centro de la polémica social, sobre todo en el ámbito de la alimentación. En Hoy por hoy con Gemma Nierga hemos entrado en este debate en compañía de José Manuel Mulet, doctor en Bioquímica y Biología Molecular por la Universidad de Valencia y profesor de Biotecnología en la Universidad Politécnica de Valencia, quien ha tratado de defender la postura científica y desmentir algunos mitos a través de su libro Trasgénicos sin miedo.
J.M.Mulet: "Hoy en día no se venden el mercado tomates transgénicos"
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La palabra transgénico goza de connotaciones negativas y con frecuencia la asociamos únicamente a los alimentos. Sin embargo, estamos rodeados de este tipo de productos: los llevan los billetes, el algodón, la ropa, los fármacos para diabéticos, los jabones... y si entramos a un supermercado, dice Mulet, "no encontraremos muchos alimentos trasgénicos" porque tienen que llevar su correcto etiquetado. El profesor sostiene que"quienes desconfían de estos productos no saben que los consumen". Por ejemplo, ocurre cuando usamos jabones de higiene íntima o comemos un filete cuya carne se ha alimentado de pienso con trasgénicos.
Durante la entrevista el invitado no ha tratado de convencer a nadie de su postura, pero ha reconocido que la comunidad científica ha fallado en la comunicación de esta labor. "No hemos sabido comunicar para qué se hacía y para qué servían", decía. El profesor ha desmentido algunas de las creencias que se tienen sobre estos productos y se ha posicionado a favor o en contra de su uso:
A favor
- Los transgénicos ayudan a disminuir la brecha social: es la postura que defiende el científico: "Si consigues hacer cultivos que sean eficientes en esos lugares donde se pasa hambre, estás consiguiendo que la producción se desplace hacia los centros donde más comida se necesita", argumentaba.
- El consumidor rechaza los transgénicos: En España y otros países como Brasil, donde se indica en el etiquetado, los consumimos. "Los productos que se etiquetan como transgénicos se venden igual que sin ella", respondía.
- Los cultivos transgénicos contaminan otras explotaciones como la ecológica: el profesor sostiene que las organizaciones ecologistas lo han demandado pero "no han puesto ni una demanda en el juzgado", solo se extienden a través películas o documentales.
- Grandes compañías como Monsanto han denunciado a agricultores estadounidenses por usar semillas transgénicas que se habían mezclado con las tradicionales. El profesor ha aclarado que se trató de un caso de vulneración de patentes ya que se vendían semillas sin licencia.
En contra
- Comemos transgénicos sin enterarnos: si viajamos a países que no etiquetan como EE. UU., China o Cuba probablemente comamos alimentos transgénicos sin darnos cuenta. El profesor informa que en otros países el sistema de etiquetado es diferente porque remarcan los que no contienen componentes transgénicos en vez de al revés y sería más fácil para los que no quieren consumirlos, acudir a los que son naturales.
- Los productos transgénicos pueden alterar el ecosistema al afectar a las especies naturales: el profesor explica que uno de los requisitos para lanzar un transgénico al espacio natural es que no se puede hibridar con ninguna especie silvestre. En cambio, "cuando no son transgénicos no se tiene en cuenta", decía.
- Las semillas no se pueden reutilizar: el profesor dice que es falso. "Si utilizas semillas híbridas, es el agricultor quien no las vuelve a utilizar porque la segunda generación será más débil".
- Muchos de los tomates que se venden son transgénicos: es falso. Hoy en día no se venden tomates alterados por ingeniería genética porque en su inicio fue un fracaso.