Ana Garrido: “Lo que hacen es matarte en vida”

Madrid

Ana Garrido que ya había pasado por La Ventana al principio del Caso Gürtel, decía que estaba bastante mejor de la última vez que hablo con nosotros porque “gané la sentencia por acoso contra el ayuntamiento de Boadilla” y “hoy es un día paradójico para mí porque laboralmente estoy intentando rehacer mi vida y el caso Gürtel sigue en mi vida”

Ana Garrido denunció en enero de 2009 pero llevaba ya un año viendo cosas, y nos confesaba que varios trabajadores del Ayuntamiento Boadilla enviaron cartas a Esperanza Aguirre porque pensaban que no era conocedora de lo que estaba pasando allí: “la mayoría de los técnicos recibamos presiones para hacer informes favorables o desfavorables dependiendo de la empresa siguiendo directrices de arriba…”.

“Yo siempre me oponía de manera sistemática y empezó el acoso, así empezó todo”, señaló.

En sus años anteriores como empleada de la administración pública: “A mí nunca me habían lanzado misivas para adecuar este pliego a tal empresa o tal persona”

Debido al acosado entró en depresión y cogió la baja: “allí empecé a investigar y me puse en contacto con Agustín Cubillo de la Ser, Javier Chicote freelancer en Inverviu… Para destapar que el alcalde tiene un patrimonio superior a los ingresos que percibía. Ellos me abrieron los ojos: esto es una trama organizada."

En todo este proceso “recibí amenas de muerte, me reventaron las cerraduras del coche tres veces, me intentaron echas de la carretera a la cuneta… parece una película policíaca”. Al preguntarle si mereció la pena, Ana Garrido aseguró que “he vivido en una casa de okupa calentando la comida en la calefacción central... Pero a pesar de todo yo lo volvería a hacer. Porque no se ser de otra manera… Me podía haber subido a la rueda y hubiera sido más fácil…”.

Eso sí lo haría de otra manera: “cambiaría cosas en el proceso, cometí muchos errores no sabía quién era Bárcenas por ejemplo. A raíz de esto soy una activista contra la corrupción”.