Gibraltar español, bien. ¿Pero los jóvenes?

Madrid

Jornada marcada por la salida del Reino Unido de la Unión Europea, ese maldito Brexit que a nadie beneficia. Aquí también hemos tenido nuestra ola made in Spain causada por Gibraltar, ese asunto viscoso y de imposible solución. Llegó el pimpollo Pablo Casado, se puso como siempre la camiseta de hooligan españolista, y allá que le dio por sacudir en las espinillas a Pedro Sánchez. “Nos ha humillado”, gritaba enardecido, porque las cartas de Teresa May no son jurídicamente vinculantes. ¿Y saben qué pasó? Pues que las consignas se posaron delicadamente en las mesas de los directores de ABC y La Razón, como en los viejos tiempos, y mientras Rubido titulaba en portada con “un acuerdo que carece de valor jurídico”, Marhuenda decía, también en primera, que “Sánchez acepta una declaración sobre Gibraltar sin valor jurídico”. ¿Se acuerdan de Hernández y Fernández, de nuestro amigo Tintín? Pues eso. Que hay que ver cómo nos gusta la prensa independiente. Pero como el Ojo sigue siendo un tipo más bien raro, debe reconocer ante todos ustedes que la noticia que más le ha impactado ha sido otra: “Los jóvenes de hoy viven peor que los mileuristas de hace una década”. Lo explicaba ayer Luis Doncel en El País: “Más precarios, más pobres y más pesimistas, a pesar de estar mejor preparados”. Una terrible vergüenza, esa juventud herida y maltratada.