Rafael Bengoa: "Hay que cambiar de modelo y atender más pacientes en su casa"

Madrid

Los profesionales de la Sociedad de Medicina de Urgencias y Emergencias denuncian que los colapsos en las urgencias y los centros de atención primaria obedecen a la falta de previsión y de médicos. Y más ahora que la gripe es ya epidemia en 10 comunidades autónomas. Estos profesionales aseguran que estamos ante un problema estructural y que uno de los grandes lastres que deja la crisis es que la mitad de los enfermos que se presentan en urgencias no han pasado antes por un centro de salud, lo que genera un embudo en el triaje y multiplica los tiempos de espera.

En algunas comunidades, un sólo médico de familia ve hasta 50 pacientes diarios de forma habitual, los médicos catalanes o andaluces han protestado porque no tienen ni 10 minutos para atender a cada uno y hay demoras en las citas de hasta 10 días. El Ministerio de Sanidad trabaja en un cambio de modelo de la Atención Primaria que se adapte a la actual sociedad el Foro de Atención Primaria recuerda que más allá de las buenas intenciones, hace falta presupuesto y que en el proyecto de cuentas de este año se destina a sanidad un 6% del PIB, la mitad que a defensa

"La demanda está creciendo hasta tensionar el sistema"

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Pero el colapso en los centros de atención primaria no se debe solo a la falta de recursos, según Rafael Bengoa, director del Instituto de Salud y Estrategia de Bilbao. Ex consejero de Sanidad del Gobierno Vasco y asesor internacional en políticas de salud. Bengoa cree que "lo que está pasando es la expresión de la demografía y la cronicididad. La demanda está creciendo hasta tal punto que hay una tensión en el sistema y el primer sitio en el que se nota es la atención primaria"

Por ello Bengoa considera que la solución no pasa solo por aumentar la inversión y el número de profesionales y pide una reforma del sector: "tenemos un modelo pasivo en el que se espera que las personas con alguna necesidad se presenten a la atención primaria. Ese modelo funcionaba el siglo pasado pero es evidente que hay que cambiar a un modelo más proactivo, controlando más enfermedades a domicilio"