Un San Valentín pasado por sangre
El 14 de febrero de 1929, San Valentín quedó asociado a algo bastante más lúgubre que los ramos de rosas y las cajas de bombones
Madrid
No hace falta que os diga qué se celebra hoy. Ya habréis visto por los anuncios que hoy es el día en el que más os vale encontrar algo para regalar al objeto de vuestros amores. Para mí, el tema del día también es un poco obligado, porque el 14 de febrero de 1929, San Valentín quedó asociado a algo bastante más lúgubre que los ramos de rosas y las cajas de bombones.
Un San Valentín pasado por sangre
01:46
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000005413930/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Por si aún no lo habéis deducido, estoy hablando de la Matanza de San Valentín, que tuvo lugar en un garaje de la ciudad de Chicago. Estados Unidos tenía prohibido desde hacía nueve años el consumo y la venta de alcohol, y esto había hecho que floreciesen las organizaciones criminales que se dedicaban a venderlo de forma ilegal.
Chicago se había convertido en el centro operacional de las más importantes de estas organizaciones y, como acostumbra a pasar, no llevaban muy bien el tema de la competencia. Por un lado estaba la organización de Al Capone, que agrupaba a los italianos. Por otro, estaban los irlandeses, aliados con los polacos. Ya llevaban años matándose entre sí, pero el 14 de febrero fue una de sus mayores atrocidades. Capone mandó a un grupo de sus hombres, disfrazados de policías, al garaje donde se reunían sus rivales. Los pusieron contra una pared como si fueran a cachearlos, y los ametrallaron a todos. Lo peor para los muertos es que el objetivo de Capone, Bugs Moran, ni siquiera estaba allí.
Así que si hoy haces un regalo que no es del agrado de tu media naranja, o el objeto de tu amor ignora tus afectos, consuélate pensando que, al menos, no te están ametrallando contra una pared.