Retorno en Grecia

O bien la memoria es flaca y los griegos no se acordaron ayer de que la conservadora Nea Dimokratia fue quien acompañó su ruina en 2009 con un déficit público superior al 10%, que disfrazó. O bien es que su nuevo líder, Kyriakós Mitsotakis cautiva al personal por ser mesurado, tener capacidad de escuchar y exhibir una orientación centrista. O bien ambas cosas.

Y hay un tercer motivo para la victoria de Mitsotakis. El izquierdista Alexis Tsipras ha empezado a remontar la economía, ha reducido el paro del 27% al 18% de la población activa, ha restaurado la sanidad de las finanzas públicas y ha recuperado la credibilidad internacional de Grecia. Pero la gente normal, incluidos principalmente sus votantes, todavía viven peor que cuando la crisis. Y quizá no le han perdonado su primera etapa, el primer semestre de 2015 vacilante, populista y desafiante respecto de la Unión Europea.

El presidente entrante llega con un programa de drásticos recortes de impuestos. Veremos si logra mantener la senda presupuestaria positiva. Y se ha apuntado a la campaña ultranacionalista contra el nuevo nombre de la vecina Macedonia. Así que el partido neonazi, Amanecer Dorado, no ha conseguido escaños. Sus electores se han apuntado al voto útil de la derecha. En muchas partes cuecen habas.