División en la Segunda B: hasta 26 propuestas para terminar la temporada
Si en lugar de anular, la Federación decide suspender la competición y jugar un playoff de ascenso algunos clubes tienen decidido acudir a la justicia ordinaria
La propuesta que la Federación lanzó el pasado martes 14 de abril supuso un terremoto en la categoría de bronce del fútbol español. La iniciativa federativa de dar la temporada por terminada, jugar un playoff de ascenso con los equipos que ocupaban antes del parón las cuatro primeras plazas de cada grupo y que no haya descensos a Tercera ha dividido a los 80 clubes que conforman la Segunda B.
A expensas de que la RFEF tome una decisión definitiva, hasta 26 clubes han enviado sus diferentes propuestas. Desde liguillas a playoffs con cuatro, seis, ocho o incluso diez equipos por grupo (algunos de ellos con ventajas para los primeros clasificados), según los intereses de cada club implicado. También se han enviado propuestas similares para dilucidar los descensos a Tercera División, un supuesto que no entra en la idea de la Federación.
A muchos clubes esta propuesta de la RFEF les pilló con el pie cambiado. Mientras que los equipos que ocupan puestos de descenso aceptan de buen grado, los que van del quinto puesto hacia abajo creen que se les está perjudicando. Alguno incluso tiene decidido acudir a la justicia ordinaria si finalmente ve afectado sus intereses. Entienden que la Federación tiene capacidad para declarar nula la temporada (empezar de cero cuando sea) pero no para suspenderla y tomar decisiones en base a las 28 jornadas disputadas.
Tras consultar la opinión de más de 70 equipos de Segunda B, hay disparidad de criterios respecto al formato del playoff o a la posible reestructuración de la categoría como la propuesta por el CD Badajoz y que ha sumado a varios equipos más. Pero dos puntos unen de forma mayoritaria a los integrantes de la categoría de bronce: el primero, que una Segunda B con más de 80 equipos supondría un agujero económico con difícil arreglo para el fútbol modesto español; y segundo, que tanto la Federación como Luis Rubiales se precipitaron en el anuncio de su propuesta el pasado 14 de abril, sin antes consultar a los clubes y cambiando de opinión respecto a lo que la Federación había mantenido en semanas anteriores: que cualquier competición que empieza tiene que acabarse.