"En las tiendas de ropa nos imponen más medidas de seguridad que en ningún otro país"

Madrid

 Tras casi dos meses de cierre, las tiendas de ropa han vuelto a la actividad. La normativa de seguridad para la reapertura de estos locales es estricta. Y los profesionales del sector no entienden ciertas medidas. Eduardo Zamácola, presidente de ACOTEX, Asociación Empresarial de Comercio Textil, Complementos y Piel, analizó en SER Consumidor la situación que atraviesa el sector.

“Lo primero que tenemos que hacer es asegurar el cumplimiento de las medidas de seguridad. Tenemos que ganarnos la confianza del consumidor para que entienda que venir a comprar es un acto completamente normal”, explicó.

Aunque el presidente de ACOTEX denunció que las medidas de seguridad que han impuesto en el mundo de la confección “son más agresivas que en otros sectores”. “No entendemos que las prendas de ropa se tengan que higienizar, cuando no se está haciendo en otros productos”, expuso. Y añadió un ejemplo: “Tú vas al súper y tocas varios productos. Estos no se tienen que desinfectar, ni higienizar, ni se guardan en cuarentena. Y nosotros es lo que tenemos que hacer”.

Zamácola alega que el virus puede vive en la ropa mucho menos tiempo que en otros productos. “En una lata, el virus puede durar hasta 7 días; en la ropa, entre 24-48 horas. Y somos nosotros los que tenemos que extremar las medidas”.

Estos protocolos, según el empresario, no se han tomado en otros países europeos, a excepción de Croacia. “Ni en el sureste asiático ni en Europa se han tomado estas medidas. Y las tiendas que han abierto están actuando con total normalidad cumpliendo con las reglas básicas”. Es decir, cumpliendo con el “distanciamiento – de dos metros- entre personas, la recomendación de uso de mascarilla, la recomendación de pago con tarjeta y la desinfección de datáfonos”.

 La situación actual del sector

La situación actual, después de dos meses de paro de actividad y cese de ventas, no es fácil. ¿Se recuperará el sector cuando se reactive el consumo?, le preguntamos.

“Es bastante probable que las prioridades hayan cambiado. Ante una situación como esta, todos tenemos miedo a la crisis económica y al desempleo. Por lo que no tienes el mismo ánimo de salir a comprar”, lamentó. Zamácola cree que este arranque “puede costar algo más” en el mundo de la moda, y expuso que ya cuentan con una “caída de los ingresos del 70%” el primer mes de apertura.

Otro de los problemas con los que se encuentran los locales actualmente es el stock. “Esto nos ha pillado en el cambio de temporada. Vamos a tener mucho”, explicó. Y comentó las dos formas que tienen los comerciantes de hacer frente a esta carga: “Hay gente que quiere hacer caja y deshacerse de este stock y otros que piensan aprovechar las condiciones climatológicas de España y, como hace calor hasta finales de septiembre-octubre, alargar esa temporada de verano y dar salida ahí a toda la mercancía”.

El presidente de ACOTEX espera que todas las empresas y tiendas textil salgan adelante, y cree que “el pequeño comercio” lo podrá hacer, en gran medida, con el apoyo del cliente. “La tienda de barrio es la que tiene la situación más complicada y puede que ahí se note la solidaridad de los consumidores”, concluyó.