El doctor Ripoll, sobre Piqué: "Si es necesario reconstruir el ligamento, la baja sería de 8 meses"

Madrid

El central del FC Barcelona, Gerard Piqué, protagonizó la gran mala noticia de la jornada en el partido de anoche en el Wanda Metropolitano con las lágrimas con las que abandonó el terreno de juego después de su lesión de rodilla. En el tramo final del encuentro, Piqué vio como Ángel Correa se le caía encima de su rodilla, provocando su inmediata caída al suelo y sus gritos de dolor.

Los servicios médicos revisaron el estado de la lesión y pidieron el cambio. A pesar de que el central azulgrana se fue andando por su propio pie del estadio entre sollozos y el doctor Ripoll analizó el escenario que se le presenta a Gerard Piqué en el último tramo de Carrusel Deportivo: "Es una lesión compleja, que tiene varias partes. Por una parte, la lesión del ligamento lateral interno, que este ligamento tiene forma de cinta, podría tratarse ortopédicamente (...) en tres meses y medio, el jugador podría haberse recuperado, pero la lesión de ligamento cruzado anterior, que tiene forma de cordón, es la que hay que explorar muy detenidamente para ver si es solvente o insolvente. Es decir, ver si el ligamento aporta estabilidad a la rodilla o no. Si no la aporta, desgraciadamente, debería reconstruirse el ligamento y nos iríamos a ocho meses", señala el doctor, poniéndose en la peor situación posible.

"Lo frecuente en estos casos, es que el jugador permanezca inmovilizado alrededor de tres semanas para ver cómo evoluciona su ligamento lateral interno, y en ese momento se harán exploraciones complementarias para ver el ligamento cruzado anterior, y es cuando se toma la decisión de entrar en quirófano o no. Yo soy moderadamente optimista", como apunta el señor Ripoll a pesar de todo ello, se muestra "moderadamente optimista" respecto a la lesión por una acción de los servicios médicos del Barcelona, a los que califica de tener "un muy alto nivel": "Soy moderadamente optimista porque si el cruzado estuviese claramente roto, los servicios médicos hubieran comunicado que habría que operarle. Nos agarramos a ese clavo ardiendo", sentencia.

El doctor Ripoll, siempre con la cautela que le caracteriza, prioriza lo psicológico por encima de lo físico donde no cree que tenga grandes dudas: "La recuperación de Piqué no me preocupa en absoluto desde el lado físico, sino por el lado psíquico" apunta a que los bajones que puede haber en el proceso de la recuperación, la posibilidad de falta de hambre por competir le pueden jugar una mala pasada al central del Barcelona, quién en las próximas semanas sabrá si tiene que pasar por el quirófano o si todo se queda en un susto, comparado con la gravedad que supone el pero de los escenarios.