Llega a Netflix 'Nevenka': "Ha rehecho su vida, pero todavía tiene cicatrices"
La plataforma de pago estrena mañana, de la mano de Newtral, una serie documental sobre Nevenka Fernández, la primera mujer que se atrevió a denunciar un caso de acoso sexual por parte de un cargo público en España
. / EFE
Madrid
Hace 20 años, mucho antes del “me too”, de las masivas concentraciones del 8 de marzo y de la explosión del feminismo, una mujer llamada Nevenka Fernández compareció ante los micrófonos de una sala de prensa de Ponferrada para denunciar el que, a la postre, sería el primer caso de acoso sexual perpetrado por un cargo público en España. El acosador en cuestión: Ismael Fernández, alcalde de la ciudad. En aquella comparecencia, Nevenka presentaba su dimisión como concejala del ayuntamiento por el Partido Popular, y anunciaba acciones legales contra el entonces líder del consistorio. Nevenka ganó el juicio, pero aquel episodio le supuso también el fin de su carrera política, el rechazo de una gran parte de la sociedad que se puso del lado del agresor, y un sentimiento de culpa y vergüenza que le hicieron exiliarse en Reino Unido, donde ha estado, desde entonces, fuera de la escena pública. Hasta ahora.
<p>"Llega el momento de agradecérselo, de manera especial, a quienes más han pagado para abrir camino. Están a punto de cumplirse 20 años desde que una concejal de Ponferrada, veinteañera por cierto en aquel entonces, anunció su dimisión y denunció al alcalde por acosarla"</p>
Mañana, 5 de marzo, llega a Netflix ‘Nevenka’, un documental que, a lo largo de tres capítulos, recuerda el caso, sus consecuencias, y nos muestra qué ha sido de Nevenka 20 años después. ‘Nevenka’ llega de la mano de Newtral, la productora gestionada por la periodista Ana Pastor; y cuenta con la dirección de Maribel Sánchez – Maroto. Ambas han pasado por los micrófonos de La Ventana para ofrecernos alguna pincelada sobre el contenido del documental y contarnos cómo se gestó el proyecto. “Nevenka ha rehecho su vida, pero todavía tiene cicatrices”, nos cuenta Maribel, que incide en repetidas ocasiones en que el acoso sufrido durante ocho meses por parte de Ismael Álvarez ha dejado una huella imborrable en el temperamento de Nevenka: “Hay episodios de su vida que prefiere no recordar. Algunos testimonios son de archivo porque ella no es capaz de contarlo. Hemos sido muy escrupulosas con sus sentimientos y hemos parado cuando lo ha necesitado”.
Ana Pastor recuerda que conoció su historia en el momento en que saltó la noticia. “Aquella mañana pensé que una mujer que estaba destruyendo su vida tenía que tener una buena razón para ello. Ahora sé que lo hizo por pura supervivencia”, explica Ana, que asegura que tenía la historia en la cabeza “desde hace mucho tiempo” y que, a pesar de la crudeza del relato, “el rodaje ha sido bonito y están sucediendo cosas mágicas”.
Nevenka contó lo que le estaba sucediendo por supervivencia. Pero, ¿por qué ha decidido, 20 años después, contarlo en un documental? “Hace diez años, cuando tuvimos la idea de hacer este documental, ella no estaba preparada”, cuenta Pastor, “y cuando empezaron a surgir movimientos como el “me too”, nos preguntamos cómo era posible que no se conociesen casos en España.
Los movimientos feministas de la última década han sido precisamente los que han animado a Nevenka a contar su historia delante de las cámaras. “El 8M también le ha ayudado a entender que hay mucha gente joven que no conocía su historia, y que ahora se está preguntando cómo pudimos dejarla sola”. Ese rechazo social es uno de los aspectos del caso en los que más se incide a lo largo del documental. Poco después de conocerse los hechos, llegó a haber incluso manifestaciones en Ponferrada a favor del alcalde. En palabras de la directora, “cuando has tomado esa postura, en la vida sólo te queda un recorrido, que es pedir perdón a Nevenka”.
‘Nevenka’ es el testimonio vivo de que el acoso sexual hacia las mujeres se ha convertido en una cuestión central en el debate público hace muy pocos años, pero ha sido una lacra de la sociedad desde que los hombres son hombres y las mujeres, mujeres. El estigma, el rechazo y la vergüenza han acompañado siempre a las víctimas, que han callado por miedo. Ahora, esos sentimientos se han transformado en rabia, indignación y sed de justicia. Teniendo en cuenta ese contexto, lo que en aquel momento hizo Nevenka, en palabras de Sánchez – Maroto, “no fue valiente, fue heroico”.
Llega a Netflix 'Nevenka': "Ha rehecho su vida, pero todavía tiene cicatrices"
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