La Lotería de la Madrina, el sorteo que cambia la vida a los huérfanos de violencia machista
Hablamos en La Ventana con uno de los beneficiarios de las becas del Fondo Soledad Cazorla que se financian a través de números de lotería amadrinados, uno de ellos, por Carles Francino
La Ventana a las 16h | Lotería La Madrina: el premio que ayuda a los huérfanos de la violencia machista
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Madrid
Con el sorteo de la Lotería del Niño a la vuelta de la esquina, llega también un año más la Lotería de la Madrina, una iniciativa para financiar el Fondo de Becas Soledad Cazorla, que ayudan a los huérfanos que han perdido a su madre a causa de la violencia machista.
Este sorteo funciona a través de las ‘madrinas’, a las que en esta edición se ha sumado Carles Francino, que amadrinan un décimo de la Lotería del Niño que cualquier persona también puede comprar. En caso de ser agraciado con un premio reintegro, la mitad de esta cantidad, es decir, 10€, pasarían a la fundación como donación.
Cambiar la vida de los huérfanos de violencia de género
Estas becas cambian la vida a niños y niñas como Joshua Alonso, que ha visitado La Ventana, y que en 2017, con 25 años, perdió a su madre, asesinada por su expareja. Su hermano tenía entonces 8 años, y fue él quien recibió la beca Soledad Cazorla.
“No eres consciente hasta que vas dando pasos de lo complejo que es tramitar las diferentes gestiones, la tutela, declaración de herederos, impuesto de sucesiones”, ha reclamado Joshua, que asegura “son muchos gastos, muchas gestiones para, en mi caso, un chaval de 25 años, ocuparme de todo eso, el gran problema es que no tuve la oportunidad de llorar la pérdida, de pasar el duelo”.
“Es muy importante el trabajo que realiza la Fundación Mujeres porque apoya en toda esta gestión burocrática y judicial a las familias”, ha explicado el beneficiario.
Ayuda económica para pagar gastos psicológicos
La ayuda económica que también ofrece la beca, una vez concedida, fue indispensable para tratar algunos de los aspectos más desatendidos de la vida de un menor tras la pérdida de su madre en unas circunstancias tan horribles como las de la violencia machista.
“No existe mucha formación en la Seguridad Social del apoyo psicológico en estos casos. Esta fue una beca de 2.000 euros durante cuatro años, y cubrió todo el apoyo psicológico de mi hermano”, explica.
Él sí que ha visto cambios progresivos en la sociedad y en el ámbito político en camino de la mayor atención a los huérfanos de violencia machista, antes considerados los grandes olvidados del sistema: “Todos estos avances lo que buscan es proteger al menor para que tenga las mismas oportunidades que cualquier otro niño o niña, que sean niños y niñas con todas las oportunidades que se merece cualquier persona”.
El número de Carles Francino, el 45124, está disponible junto al de otras ‘madrinas’ como Rozalén (59743), Ana Pastor (39821) o Sandra Sabatés (72605). Este año también el propio Joshua tiene un número, el 34936, situándose así al otro lado de una iniciativa que tanto le ayudó a él y a su familia.
Paula García
Redactora en prácticas en La Ventana desde 2021. Previamente en la Agencia Efe en Madrid y Berlín, Alemania....