El fin de las importaciones de diésel a Rusia no tiene por ahora impacto en los bolsillos
El suministro "está garantizado", según confirma el Gobierno de España, y el precio del combustible sigue a la baja desde hace dos semanas
Logroño
La Unión Europea ha decidido poner fin a las importaciones de diésel procedente de Rusia por la guerra de Ucrania. Se trata de una vuelta de tuerca más en las sanciones de naturaleza económica que la Comisión Europea está aplicando para presionar Vladimir Putin y avanzar en la resolución de un conflicto que está a punto de cumplir su primer año desde la invasión rusa. La UE garantiza el suministro de este carburante.
De hecho, en el último trimestre de 2022 las compras de productos petroleros de la UE a Rusia disminuyeron hasta el 14,14 % del total de las importaciones, frente al 25,9% del primer trimestre, según datos de Eurostat, recogidos por cadenaser.com.
El suministro está garantizado
La posición de España es similar: el suministro no corre ningún peligro. "Nuestro país consume alrededor de ocho millones de toneladas de diésel y las importaciones de Rusia suponen entre el 10% y el 12% aproximadamente, lo que deja a las claras que existen alternativas al alcanza para sustituir esta oferta sin problema alguno". Así lo asegura el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de La Rioja, Fernando Antoñanzas.
Asia y Oriente Medio parecen los mercados con más opciones para hacerse cargo de la cuota rusa y "compensar a corto y medio plazo" este suministro.
"Los precios suben en ascensor y bajan por la escalera"
Antoñanzas no se muestra tan optimista sobre otra de las derivadas que ha agravado el conflicto bélico en Ucrania: los precios. En su opinión, se van a mantener en niveles altos, como está ocurriendo en los últimos meses. "No se va a poder contener su evolución al alza porque muchas de las presiones siguen existiendo y no se han eliminado".
No obstante, apunta que "contra pronóstico España ha cerrado 2022 con una subida del 5,7% que nadie podía vaticinar".
Evolución a la baja del precio del diésel
De momento, el final de las importaciones rusas de diésel no ha supuesto una subida del precio. "Todo lo contrario", señala la presidenta de la Asociación de Estaciones de Servicio en La Rioja, Ana Benés. "El precio de la gasolina y el diésel acumula, al menos, dos semanas de lenta y progresiva caída", desde que hace casi un año alcanzara su pico máximo por encima de los dos euros el litro.
"Estas últimas medidas, por ahora, no tienen efecto en el precio ni, por extensión, en los bolsillos de los ciudadanos", añade Benés.
El final del descuento de veinte céntimos
Por otro lado, la responsable de las gasolineras riojanas asegura también que el final de la bonificación de veinte céntimos al precio de los combustibles "no está suponiendo ningún cambio de hábito y costumbre en los conductores". Una medida que solo se mantiene para el sector del transporte por carretera.
"Al final", añade, "la gasolina y el diésel son elementos indispensables en nuestro día a día, ya sea para trabajar, estudiar, desplazarse a la segunda residencia o viajar" y, por tanto, "por ahora no hay cambios significativos".
Sin embargo, señala que "habrá que estar pendiente en los próximos meses". "Enero no es un mes del que se puedan sacar muchas conclusiones. El consumo baja, después de Navidad, por lo que habrá que esperar todavía un poco más para ver si se aplican alguna medida de ahorro o menor consumo en la conducción", zanja.