La rebaja de impuestos toma forma en La Rioja

Logroño

La Rioja se prepara para una rebaja fiscal inmediata. La rotunda victoria del PP en las elecciones autonómicas y locales, que le dio la lleve para gobernar en La Rioja, por mayoría absoluta, pero también en Logroño, todas las cabeceras de comarca, salvo Arnedo y Torrecilla, hasta aglutinar casi el 80% de la población en la región, abre paso, una vez constituidos los nuevos ayuntamientos y el Ejecutivo regional, a la rebaja fiscal. Se trata de una de las prioridades incluidas en el programa electoral de la formación política.

Un compromiso que dejó claro Gonzalo Capellán en su debate de investidura como presidente en el Parlamento de La Rioja, con la eliminación de los impuestos de donaciones y sucesiones, la reducción del IRPF para las rentas medias y bajas, la recuperación de la deducción por la compra de vivienda y las bonificaciones para los autónomos, un colectivo que suma 25.000 profesionales en La Rioja.

Y al nuevo líder del PP en La Rioja, le acompañaron, por ejemplo, el alcalde de Logroño, Conrado Escobar, en la toma de posesión como nuevo regidor de la capital, o la alcaldesa de Calahorra, Mónica Arceiz, durante la campaña electoral. En el debate electoral celebrado en la Cadena SER de La Rioja, la primera regidora de la cabecera de comarca dejó claro cuál es la intención de la formación azul: "el dinero donde mejor está es en el bolsillo de las familias y las empresas".

"Una buena noticia para las empresas familiares"

El experto fiscal, doctor en Economía y máximo responsable de la firma Arnaut Fiscal y Legal, Basilio Ramírez, ha dejado claro, en La Ventana de La Rioja, que "la supresión de los impuestos de patrimonio y sucesiones es una buena noticia para la empresa familiar".

No en vano, este tipo de pequeña y mediana empresa genera el 12,5% del Producto Interior Bruto regional, con una facturación anual superior a los 1.000 millones de euros y más de 3.200 empleos, de acuerdo a los datos de la Asociación Riojana de la Empresa Familiar. Además, estas compañías contribuyen con 16 millones de euros al año y la sucesión es uno de los principales problemas que les afectan.

"Muchas de ellas se ven obligadas a cerrar o cambiar de manos en el momento en el que se plantea el traspado de padres a hijos", reconoce Ramírez.

Este experto sositene que sería preciso avanzar hacia "una armonización de este tipo de impuestos" para evitar desigualdades entre las comunidades. Eso sí el impacto de esta clase de impuestos en el total de la recaudación autonómica es limitada, apenas 6 millones de euros. "Las comunidades reciben sus recursos propios de dos impuestos: los que gravan a las rentas (IRPF) y a las empresas con el de sociedades", concluye Ramírez.

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