Radiografía del campo en La Rioja

Logroño

La Rioja es una región con especial peso de la agricultura y la ganadería no solo en la economía y el empleo sino también en la vida de la mayoría de los municipios -sólo 9 de los 174 tienen una población superior a los 5.000 habitantes y 64 cuentan con menos de 100 vecinos- en una región con poco más de 324.000 habitantes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El sector primario representa el 4,7% del Producto Interior Bruto regional, que en 2023 estableció su récord por encima de los 9.500 millones de euros, según el INE. El número de profesionales asciende a 3.654, de acuerdo a las afiliaciones en el régimen especial agrario de la Seguridad Social. Una cifra a la que se debe sumar aquellos que lo hacen en su condición de autónomos para superar los 5.000 en total en un momento en el que el mercado laboral se mueve también en sus registros más altos de la historia en la comunidad. Y en este colectivo también habría que tener en cuenta a aquellos con pequeñas parcelas, que complementan los ingresos de su actividad principal lejos del campo.

Vino y cereal

La vid y el cereal son los dos cultivos más extendidos con más de 47.000 hectáreas en cada caso, según las cifras del Instituto de Estadística de La Rioja.

Ampliar

Cerrar

La Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja ha cerrado 2023 con una caída de la comercialización de un 5,18% hasta alcanzar los 238 millones de litros (325 millones de botellas). Un resultado que ahonda en la crisis de ventas de la DOCa Rioja, cuya evolución descendente se ha acentuado desde 2018.

En este contexto y con una crisis de rentabilidad -los agricultores acumulan cuatro años sin poder cubrir los costes de producción-, sobre la mesa están dos demandas esenciales: la eliminación del vino de mesa y el arranque del viñedo para reducir el potencial productivo.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Las cooperativas riojanas no apoyan la eliminación del vino de mesa en Rioja

En el caso del cereal, la crisis es de precios. "Han caído un 30% y ahora están por debajo de los niveles previos a la pandemia", asegura Óscar Salazar, presidente de UAGR y cerealista en La Rioja Alta.

Champiñón

Por su parte, el champiñón, otro cultivo en crisis, es el segundo que recibe una ayuda extraordinaria del Gobierno de La Rioja para superar la coyuntura después del vino, al que se han destinado 15 millones de euros en 2023 para que las bodegas y cooperativas puedan destilar vino amparado.

"Necesitamos estas ayudas porque el sector del champiñón está en un momento crucial"

La producción del champiñón en La Rioja alcanza las 70.000 toneladas anuales, lo que le convierte en líder nacional, además de poseer una cuota del 40% de las exportaciones nacionales de este producto. Un cultivo con tiene especial implantación en La Rioja Baja, en Autol, Pradejón y Ausejo, con más de 2.500 puestos de trabajo directos.

Aceite

El aceite de oliva ha duplicado su precio en el último año hasta alcanzar los 10 euros por litros aproximadamente. La producción de la Denominación de Origen Protegida (DOP) La Rioja alcanza la cifra de 400.000 litros al año y se comercializa a través de 70 marcas.

La principal demanda procede, en este caso, de la competencia desleal de la importación de aceite de oliva de fuera de la UE, así como de la "subida de costes de producción", según asegura la responsable de comunicación de la DOP Aceite de La Rioja, Elvira Cantabrana.

Y junto al aceite, el pimiento riojano, con siete empresas cultivadoras y transformadoras de la comarca de Nájera y Santo Domingo. "Esta coyuntura de precios altos ha venido para quedarse", afirma el presidente de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Pimiento, Riojano, Jesús Martínez.

Ampliar

Cerrar

Ganadería

La ganadería no es ajena a estas circunstancias y también tiene sus particulares demandas. Es el caso de la cabaña de porcino, la segunda más extendida en La Rioja con más de 143.000 ejemplares, según el Instituto de Estadística de La Rioja. Más aún cuando hablamos de producción ecológica, cuando los problemas crecen.

"La producción ecológica se enfoca hacia la poca cantidad en favor de la calidad, unos costes que se compensan con un precio de venta más alto, pero que implican mucho esfuerzo a nivel de trabajo y gestión. Con esta inflación la gente se lo piensa mucho a la hora de meterse la mano al bolsillo. Estamos mucho peor que hace unos años", asegura Delia Gil, de Embutidos Luis Gil.

Ampliar

Cerrar