EEUU cree que el atentado de Riad pretendía derrocar al régimen saudí
Al menos 17 personas han muerto, según las cifras oficiales
El secretario de Estado da por seguro que Al Qaeda está detrás del ataque
El número dos de Colin Powell, Richard Armitage, ha asegurado a la televisión de Arabia que con el atentado que ha causado la muerte al menos a 17 personas en Riad Al Qaeda quería derrocar a la familia real saudí.
El atentado que en la medianoche del sábado destruyó parte de una exclusiva zona residencial del oeste de Riad, la capital de Arabia Saudí, se ha cobrado por el momento la vida de 17 personas mientras que el número de heridos se mantiene en 122, según el último balance oficial.
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Un funcionario del Ministerio del Interior dijo a los periodistas que, después de finalizados los últimos trabajos de desescombro en la zona afectada, se han rescatado 17 cuerpos sin vida, cinco de ellos de niños, y que se han contabilizado 122 heridos de distinta consideración internados en distintos hospitales, cifra que no ha variado en las últimas horas. El funcionario precisó que 13 de los cadáveres corresponden a personas de raza árabe, mientras que los otros cuatro no están aún identificados.
El príncipe Nayef, ministro del Interior saudí, en declaraciones durante una visita hoy al complejo devastado, dijo que la policía de su país capturará y castigará a los autores de estos hechos y también subrayó que aquellos que quieren doblegar al Gobierno fracasarán en sus objetivos porque "nuestra fuerza proviene de Dios".
"Todos aquellos que perpetran actos de esta naturaleza deben frenar o entregarse, porque será bueno para ellos y para su salvación", dijo durante su visita al complejo atacado, situado en el oeste de la capital.
"No hay crimen más infame que este. Realizado contra un país y contra unos ciudadanos, en un lugar que acoge a árabes y a musulmanes", agregó.
Diversas fuentes periodísticas y gubernamentales apuntan a que la red terrorista Al Queda está detrás de este brutal atentado contra el complejo residencial habitado por ciudadanos de distintos países árabes y por occidentales.




