Prodi pone freno a las aspiraciones de España y Polonia en la cumbre de Bruselas

El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, ha enviado un mensaje claro a España y Polonia apenas unas horas antes del debate definitivo sobre la reforma del reparto del poder en la Unión Europea: el sistema de votación por doble mayoría es irrenunciable.

"Los puntos de partida que dio la Convención son aceptables y ofrecen perspectivas de futuro para la UE, por lo que no pueden ser variados a última hora", señaló el presidente del Ejecutivo comunitario.

Con esta postura, el Ejecutivo europeo se une a la presidencia de la Unión, Italia, y a Francia y Alemania, que desde hace semanas insisten en que el sistema de doble mayoría es el único posible para tomar decisiones en la futura UE ampliada.

APOYO A LA DOBLE MAYORÍA

Prodi rechazó que la reunión de los jefes de Estado o de Gobierno de Bruselas que se inicia mañana se convierta en un "mercadeo", ya que en su opinión "todos tienen que actuar en interés de Europa".

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Su apoyo al sistema de "doble mayoría" ya quedó plasmado en la cumbre de Niza (diciembre de 2000), donde se quedó "solo defendiéndolo", ya que a su juicio "es el único transparente", aunque hubiera preferido hablar de "mayoría simple", tanto en los umbrales de países como de población. Resaltó que cuando se propuso ese sistema por primera vez "no teníamos posibilidad de éxito", aunque ahora "se han ido sumando apoyos gracias al contenido de las propuestas".

MINISTRO DE EXTERIORES

Sobre la figura del ministro de Exteriores de la UE, Prodi dijo que "la CE apoyará cualquier esfuerzo para mantener una de las iniciativas esenciales de la Convención, que es el ministro de Exteriores". En su opinión "debe ser vicepresidente y miembro de pleno derecho de la Comisión", aunque la Constitución "no debe entrar en definir detalles de su organización", como tampoco lo hacen las constituciones nacionales respecto a la organización de los ministerios.

Romano Prodi defendió una vez más que el colegio de comisarios esté integrado por un comisario de cada país miembro, debido a que su "experiencia" le indica que "cuando se trata un problema nacional en la CE, siempre es bueno contar con un representante de cada país".

Respecto a la posibilidad de posponer la entrada en vigor de algunas reformas incluidas en la Constitución, dijo que "el problema no se ha planteado, y en todo caso se tendrá que examinar en el marco de decisión general".

La Comisión Europea también es partidaria, según Prodi, de adoptar un mecanismo claro que permita modificar en un futuro algunos postulados de la Constitución, si fuese preciso. En ese caso defendió que los posibles cambios se decidan por mayoría y se evite la unanimidad.