Metro defiende la seguridad del vagón donde ayer murió un bebé
La justicia ha abierto también una investigación
Los sistemas de seguridad de las puertas del vagón de Metro donde ayer se produjo un accidente que costó la vida a un bebè de cuatro meses "funcionaban perfectamente", según han puesto de manifiesto las primeras investigaciones de la empresa.
Así lo indicó hoy el consejero de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, al tèrmino del Consejo de Gobierno regional, donde transmitió, en nombre propio y del Ejecutivo madrileño, el pèsame a los familiares de la pequeña.
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Granados recordó que diariamente se producen en el Metro de Madrid "tres millones de entradas y salidas de viajeros a los vagones", a pesar de lo cual, dijo que nunca antes había ocurrido "un incidente de la gravedad" del de ayer.
La niña falleció, al parecer, tras ser arrastrada por el convoy y caer a las vías, al quedar el carrito atrapado en las puertas del vagón, mientras su madre lo empujaba para salir del mismo cuando ya había sonado el silbato que indica que se van a cerrar las puertas.
OBJETOS DE MÁS DE 25 MILÍMETROS
Según el Consejero, las puertas de los vagones de metro disponen de un sistema de seguridad que hace que el convoy no arranque de la estación si, al cerrarse, detectan que en medio ha quedado atrapado algún objeto de más de 25 milímetros de grosor.
Este sistema, que según ha comprobado Metro funcionaba en las puertas del vagón donde se produjo el accidente, no detectó, sin embargo, que al cerrarse èstas habían "pillado" en medio alguna prenda que colgaba del carrito de la niña y cuyo grosor debía ser demasiado fino para activar el mecanismo de seguridad.
El consejero señaló que Metro continúa investigando "más en profundidad" las causas del accidente, a la vez que se desarrolla la correspondiente investigación judicial.
LA VERSIÓN DEL JEFE DE ESTACIÓN
El jefe de estación, que explicó que relevó a su compañero en este servicio según el horario normalmente establecido, consideró que el trágico suceso se debió a que la madre trató de salir del vagón cuando ya había sonado el silbato que indica el cierre de puertas y el inicio de la marcha del convoy. Y añadió que "en toda la línea de Metro", una vez que se cierran las puertas y el tren arranca, el conductor no puede ver lo que está pasando en el andén.
