Duro revés en la UE a los intereses de los productores españoles de aceite y algodón

Los ministros de Agricultura y Pesca de los Quince alcanzaron esta noche tras 20 horas de maratoniana negociación un acuerdo sobre la reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del aceite de oliva, tabaco y algodón con el voto en contra de España, Dinamarca y Suecia. La ministra Espinosa no ha aceptado los 20 millones de euros para los olivareros ofrecidos por el comisario europeo si España votaba a favor. Tampoco el resultado ha sido positivo para el sector algodonero. Sin embargo, los productores de tabaco se repartirán 117 milones de euros.

La oposición española es significativa ya que era el país que mayores intereses tenía en los tres sectores afectados. Finalmente, España no recibirá ningún dinero suplementario para el aceite, a pesar de que el comisario europeo de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, ofreció 20 millones de euros a la delegación española a cambio del voto positivo en todo el paquete.

Éste fue el precio ofrecido por Fischler después de haber entregado a Portugal y Francia un total de 20 millones al incluir 3.500 hectáreas francesas y 30.000 portuguesas de las superficies elegibles dentro de la UE para recibir ayudas, a pesar de que se empezaron a plantar en 1998.

En lo que se refiere a los porcentajes, la Comisión aceptó que el 60 por ciento de las ayudas queden desvinculadas, aunque se da libertad -tal y como quiere España- para que cada Estado miembro amplíe la desvinculación hasta el cien por ciento.

El nuevo régimen prevé hasta un 10 por ciento del importe que percibe el sector de forma desacoplada y que podrá dedicarse para mejoras de calidad que deberán desarrollarse en un período posterior.

Los Quince han alcanzado el acuerdo por mayoría cualificada tras intensas unas negociaciones que comenzaron el miércoles por la mañana. Con estas reformas, se introduce un nuevo sistema de ayudas por superficie, basadas en referencias históricas, que se concederán a los agricultores independientemente de que produzcan o no. La UE ha establecido que en el caso del aceite de oliva, el 60% de las ayudas se convierta en un pago único desvinculado de la cosecha, aunque este porcentaje podría ampliarse.

Además del varapalo para los olivareros, España sufre un fuerte impacto en el sector del algodón. El texto final recoge una desvinculación de las ayudas del 65%, por encima de la propuesta inicial del comisario europeo Fischler, del 60% y, sobre todo, muy alejada de la reclamación española de un máximo del 20%. En España existen 90.000 hectáreas de cultivo algodonero, la mayor parte de ellos en la comunidad autónoma de Andalucía. Alrededor de 10.000 cultivadores viven de este trabajo, según indicaron representantes españoles del algodón, quienes mostraron su profundo descontento por el acuerdo. Asimismo, los ministros también han aprobado que el 65% de las actuales subvenciones al algodón se pague independientemente de que el agricultor produzca y el resto será repartido por los países.

El tabaco salió mejor parado de lo previsto para España, ya que los productores podrán repartirse este año 117 millones de euros, frente a los 113 de la temporada pasada. La aceptación de Fischler y los países nórdicos de que sólo se desvincule el 40% de las ayudas y que el resto quede vinculado a la producción permitió un consenso en este punto. Ese 60% de ayudas restantes en función de lo producido deberá beneficiar a aquellos productores que viven en regiones 'Objetivo 1', como en el caso de Extremadura, principal región productora española, o a aquellos que produzcan "variedades de una cierta calidad", se indicó en el texto final del acuerdo.

Este esquema se mantiene únicamente hasta 2010, momento en el que las ayudas de la UE quedarán desvinculadas en un 50% y la mitad restante se destinará al fomento de programas de desarrollo rural. Por lo tanto, los productores de tabaco españoles tendrán cinco años de margen antes de dejar de recibir ayudas directas.

ESPINOSA: "HEMOS LUCHADO HASTA EL LÍMITE"

La ministra española de Agricultura, Elena Espinosa, ha asegurado que "ha luchado hasta el límite" para evitar que salieran adelante las reformas del aceite de oliva, algodón y tabaco aprobadas esta madrugada por los Quince. España estudiará posibles actuaciones ante el Tribunal de Justicia de la UE.

Espinosa afirmó, en conferencia de prensa, que las reformas "no complacen" al sector español y agregó que en la negociación del Consejo de Agricultura, que comenzó ayer, se lo han "jugado todo".

La ministra aseguró que las concesiones que ofrecía el comisario de Agricultura, Franz Fischler, especialmente en el aceite de oliva "eran una moneda de cambio y aceptarlas hubiera tenido un coste muy alto". La Comisión Europea ofrecía un aumento de presupuesto para los olivareros españoles, de 20 millones de euros, frente a los 119 millones de euros adicionales que había pedido España.

La ministra, que durante la negociación contactó con las comunidades autónomas afectadas, señaló que trabajará con el sector para conseguir "nuevos horizontes". Asimismo, se reunirá con las autonomías para hablar sobre la aplicación de estas reformas, pues tiene de plazo hasta el 5 de agosto de 2004.

Indicó que el resultado del Consejo "no es un fracaso personal", defendió que volvería a repetir la forma en que ha negociado, y recordó que el equipo que encabeza no es el que ha trabajado los nueve meses anteriores, tiempo durante el que se han negociado estas reformas en la UE.