El Gobierno niega tener una estrategia de enfrentamiento con la Iglesia

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, negó hoy una estrategia predeterminada del Ejecutivo que busque un enfrentamiento con la Iglesia católica. "Este es un Estado laico, aconfesional y no hace falta ningún tipo de plan" para garantizarlo, argumentó.

Según publica hoy el diario "El Mundo", el Ejecutivo está pidiendo informes y estudios en tres niveles: la financiación de la Iglesia católica a través del IRPF, su protagonismo en la educación pública y las subvenciones sociales a entidades directamente vinculadas a la Conferencia Episcopal.

El diario sostiene que la primera decisión va a ser que el próximo año no se prorrogarán automáticamente los acuerdos Iglesia-Estado, como se ha venido haciendo en los últimos ejercicios. Se van a revisar y releer desde una "óptica constitucional".

Sin embargo, los acuerdos firmados en 1979 entre el Estado español y la Santa Sede, firmados sólo seis días después de la entrada en vigor de la Constitución, no van a ser denunciados, pero se abordarán "desde una visión constitucionalista".

"ACTUALIZACIÓN" DE LAS APORTACIONES A LA IGLESIA

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Hoy, el vicepresidente segundo, Pedro Solbes, presente en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros junto a María Teresa Fernández de la Vega, ha intentado quitar hierro a la polémica afirmando que va a haber una "actualización" de la aportación del Estado a la Iglesia católica en los Presupuestos Generales del Estado para 2005.

De la Vega ha insistido en que "no hay ninguna novedad", sino que lo que quiere el gobierno es "extender el derecho de los ciudadanos" a vivir en un Estado laico, y por eso ha aprobado reformas como la agilización del divorcio o los matrimonios homosexuales. Unas medidas, recalcó, que "no obstaculizan" el que siga habiendo canales de diálogo con la Iglesia católica.