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Sociedad

El PSE pedirá al TC que ampare el derecho de su parlamentaria a votar

En la aprobación de los presupuestos Irene Novales no pudo votar por fallo técnico o humano

El PSE-EE ha anunciado hoy que solicitará al Tribunal Constitucional (TC) que ampare el derecho de su parlamentaria vasca Irene Novales a votar, después de que el presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, se negara a repetir la votación de los presupuestos de este año.

El portavoz de los socialistas vascos, Rodolfo Ares, explicó que han tomado la decisión de presentar en las próximas semanas un recurso de amparo ante el TC basándose en el artículo 23 de la Constitución, el que hace referencia al derecho de los ciudadanos a participar en los "asuntos públicos, directamente o por medio de representantes".

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Esta decisión la ha adoptado el Grupo socialista en respuesta a la decisión de Atutxa de no repetir la votación del proyecto de presupuestos del 28 de diciembre del año pasado, después de que la parlamentaria Novales no pudiera emitir su voto, según el PSE-EE por un fallo en el sistema y según Atutxa por un error de la propia diputada.

Como consecuencia de esta situación, los presupuestos fueron aprobados ya que de haber emitido Novales su voto se hubiera producido un empate y de mantenerse en una posterior votación el proyecto habría decaído.

Ares explicó que esta "no es una pelea sobre si el Gobierno Vasco debe tener presupuesto o no", sino que "estamos defendiendo el derecho al voto" de una representante de la ciudadanía. Insistió en que la parlamentaria estaba presente en la sesión, en su escaño, donde tenía "la tarjeta activada y que intentó votar y no pudo" y que, pese a que "Atutxa y sus fieles colaboradores han intentado trasladar urgentemente y con angustia que la situación se dio por errores de nuestra compañera nosotros sabemos que la máquina no le permitió votar".

El portavoz del PSE-EE en el Parlamento Vasco criticó que Atutxa pudo comprobar el sistema momentos después del incidente pero "no lo hizo y se apresuró a dar por cerrado un pleno, incluso antes de que se realizaran otras votaciones, porque sabía que estaba beneficiando al Gobierno".

También censuró que el presidente del Parlamento, en un "tono prepotente habitual en él", dijo, "no permitiera siquiera que la Mesa pudiera debatir el escrito de reconsideración" presentado por su grupo y anunciara antes de la reunión del órgano de gobierno de la Cámara en un medio de comunicación su decisión de que la votación era "inamovible".

"Se ha negado a rectificar cuando sabe que lo lógico, coherente y necesario es que por encima de los problemas (técnicos) está el derecho de los parlamentarios a emitir su voto", sentenció. Dijo que ya que Atutxa "no quiere amparar el derecho de los parlamentarios por encima de su defensa de los intereses del Gobierno Vasco", han tomado la decisión de presentar un recurso frente a "esta arbitrariedad y atropello".

Explicó que los sistema de votación deben estar "al servicio de los parlamentarios y no ser un obstáculo" para ellos y defendió el respeto a la "expresión real de las mayorías y las minorías" en la Cámara. "Si se niega el derecho al voto de un parlamentario -concluyó- se está defraudando la libre decisión de los vascos, al menos de los cientos de miles de vascos que han votado al Partido Socialista de Euskadi".