La UE podría dejar al español fuera de las lenguas de trabajo
La Comisión quiere que sólo lo sean inglés, francés y alemán para ahorrar costes
Bruselas quiere limitar el número de lenguas que se utilizan en las comparecencias públicas argumentando el gasto que acarrea. Esa limitación dejaría en tres las lenguas de trabajo habituales: inglés, francés y alemán. Ante esta situación, han protestado airadamente España e Italia.
España advirtió hoy que el uso exclusivo del inglés, francés y alemán (las denominadas lenguas de trabajo de la UE) no puede ser generalizado en todas las instituciones comunitarias.
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En la reunión del Comité de Representantes Permanentes, formado por los embajadores de los veinticinco Estados miembros de la UE, el embajador español, Carlos Bastarreche, afirmó que España no acepta ese sistema, informaron fuentes comunitarias.
El asunto se discutió en un breve debate, de unos diez minutos, en el que se trataron las quejas presentadas por España e Italia por la exclusión de la mayoría de los idiomas oficiales de la UE, entre ellos el italiano y el español, en las conferencias de prensa de los comisarios que se celebran en un día diferente al miércoles.
El alemán, el idioma más hablado en la UE
Hasta finales del pasado mes de noviembre, las ruedas de prensa de los comisarios eran traducidas a todas las lenguas oficiales de la UE, que eran 11 con los antiguos Quince socios y que han pasado a 20 en la nueva Unión de 25 miembros.
Según datos de la Comisión, el alemán es el idioma que más europeos tienen como lengua materna en la UE, con un 24%, seguido del francés, inglés e italiano, los tres con un 16%, y el español, con un 11%.
Si se tiene en cuenta el porcentaje total de personas que lo hablan, el ingles se sitúa a la cabeza, con un 47%, seguido del alemán, con un 32; francés, un 28 y español, un 18%.