Los avales para la fianza de Otegi no son suficientes

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ha comprobado esta noche que el aval bancario depositado por los abogados del ex parlamentario de Batasuna Arnaldo Otegi no es suficiente para cubrir la fianza decretada para su puesta en libertad.

Según informaron fuentes jurídicas, Grande-Marlaska se puso esta noche en contacto con el juzgado número 4 de Bilbao y confirmó que los abogados de Otegi habían presentado el aval bancario tal y como le habían anunciado, pero que éste sólo alcanza los 200.000 euros, cuando la fianza decretada es del doble, es decir, de 400.000 euros. Las fuentes consultadas señalaron que ante esta circunstancia es muy probable que Otegi no pueda ser hoy excarcelado.

Desde anoche en Soto del Real

Grande-Marlaska decretó anoche prisión eludible con fianza de 400.000 euros para Otegi por un delito de integración en la organización terrorista ETA, como dirigente. El portavoz de Batasuna ingresó anoche en la prisión madrileña de Soto del Real.

Cuando se deposite la fianza correcta, Otegi podrá abandonar la prisión, aunque deberá comparecer dos veces por semana en el juzgado más próximo a su domicilio y tendrá prohibido salir del país o cambiar de residencia sin comunicárselo a la Audiencia.

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Otegi, a un módulo de aislamiento por seguridad

El ex parlamentario de Batasuna fue trasladado a primera hora de la tarde al módulo de aislamiento de la prisión por motivos de seguridad, informaron fuentes penitenciarias.

Se trata de un departamento de régimen especial, en el que se le restringen los movimientos y los contactos con otros internos. De esta forma, estará solo en la celda, comerá en ella y saldrá unas horas al patio también en solitario.

Otegi, que hasta las dos de esta tarde no había recibido aún visita alguna, pasó la noche en una celda compartida del módulo de ingresos del centro penitenciario de Soto del Real, en la que entró sobre las dos y cuarto de la madrugada por orden del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska. Tras la toma de huellas y la foto pertinentes, fue reconocido por un médico y visitado por un trabajador social y un psicólogo, como es habitual.