El 'Rita' se dirige a Texas rebajando su potencia

El huracán 'Rita' sigue su camino hacia Texas, hasta donde se espera que llegue en la madrugada del viernes. El último parte rebaja su potencia del nivel cinco a cuatro, con vientos de hasta 240 kilómetros por hora. Miles de personas han abandonado ya la costa del Golfo de México. Por su parte, las autoridades ya han ordenado la evacuación de Texas, Galveston, Corpus Christi y parte de Houston.

A pesar de este rebaje de potencia y del pronóstico de un leve debilitamiento en las próximas 24 horas hasta disminuir al nivel 3 cuando toque tierra, el Centro Nacional de Huracanes de Miami sigue considerándolo de "extremadamente peligroso".

La imagen que los americanos vieron en las carreteras de Nueva Orleáns por culpa del huracán 'Katrina' se repite en las autopistas de salida de varias ciudades de Texas. Las autoridades han decretado evacuaciones en Galveston, Corpus Christi y parte de Houston porque no quieren que vuelva a generarse el caos vivido hace unas semanas.

Se han evacuado ya los hospitales, residencias de ancianos y la población más vulnerable, en ambulancia, helicópteros y autobuses. Ahora el objetivo es vaciar la gran mayoría de las localidades costeras del estado, donde se espera que 'Rita' toque tierra a partir de última hora del viernes.

En 1900 murieron 8.000 personas en un huracán en Galveston

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En Galveston, una ciudad de 60.000 habitantes asentada en una isla en la que se concentra gran parte de la industria petrolera del Golfo de México, no quieren volver a vivir la tragedia de 1900, cuando uno de los huracanes más mortíferos de toda la historia de EEUU se cobró la vida de unas 8.000 personas.

Otra de las zonas de riesgo es Houston, una de las ciudades más poblada del país, con unos cuatro millones de habitantes sólo en su área metropolitana y otros dos más en sus alrededores.

Bush se moviliza tras las críticas por el 'Katrina'

Ante esta situción, y después de las duras críticas recibidas por la gestión del 'Katrina', la Administración de la Casa Blanca se está movilizando con medidas similares a las adoptadas después de los atentados del 11-S.

George W. Bush ha mantenido encuentros por videoconferencia con los gobernadores de la zona y mantenido reuniones personales con los responsables locales y federales para comprobar que todo está dispuesto para "lo peor", como dijo ayer en un discurso.