Prohíben a divorciados y parejas de hecho ser padrinos de bautizo
El Arzobispado de Santiago pretende devolver el sentido religioso al sacramento
Si está divorciado no podrá ser padrino en un bautizo en Santiago de Compostela. Una circular del Arzobispado de Santiago de Compostela prohíbe a divorciados, miembros de parejas de hecho y casados por lo civil ser padrino de bautizo.
La Iglesia gallega quiere devolver el sentido religioso al sacramento del bautismo, por eso va 'a mirar con lupa' a los que quieran ser padrinos en un bautizo. La lista de los que no podrán ser candidatos es larga: casados por lo civil, divorciados, pareja de hecho, no practicantes y no confirmados.
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También tendrán difícil ser bautizados los bebés nacidos de una pareja que no esté casada por la Iglesia. Sólo recibirán el sacramento si el sacerdote se convence de que el niño va a ser educado en la religión católica. Estas disposiciones que incluye el último Boletín Oficial del Arzobispado de Santiago de Compostela son de aplicación inmediata.
