Irak levanta el toque de queda impuesto para frenar la violencia por la crisis de las mezquitas

El Gobierno iraquí ha impuesto hoy durante varias horas el toque de queda en Bagdad y tres provincias cercanas. Se pretende frenar la ola de violencia desatada entre chiíes y suníes tras el atentado del miércoles contra un santuario chií en Samarra, pero de nuevo hoy -pese a ser el día de oración- se han producido tiroteos, secuestros y ataques. El toque de queda, impuesto a las 06.00 horas (de España), ha sido levantado ocho horas después.

Pese a que todos los comercios están cerrados a cal y canto en las grandes ciudades del país, no está siendo un viernes de oración tranquilo.

El último incidente del que se han hecho eco las agencias se ha registrado en el oeste de Basora. Allí, en el barrio de Hayaniya, hombres armados secuestraron a los tres hijos de un diputado chií. Según la agencia de noticias Europa Press, los niños tienen edades comprendidas entre los 11 y los 7 años.

Además, en el oeste de la capital, Bagdad, fuentes policiales que cita la agencia EFE aseguran que grupos armados chiíes y suníes se han enfrentado a tiros. Estas fuentes no informan de momento si se han producido víctimas. Al parecer, el tiroteo se produjo en el barrio de Al Turaz -donde vive población de ambas religiones- entre una milicia radical chií y suníes armados.

Por otro lado, hombres armados irrumpieron en una casa al sur de Bagdad a primera hora de la mañana y asesinaron a cinco chiíes, según informó un oficial del Ejército iraquí. Este ataque se produjo hacia las 4:00 horas en la localidad de Latifiya, a unos 30 kilómetros al sur de la capital. Unas dos docenas de chiíes vivían en la casa atacada. Los asaltantes separaron a hombres y mujeres y a continuación abrieron fuego, según esta fuente.

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Desde el atentado contra la Mezquita Dorada, más de 130 personas han muerto en el país, en su mayoría suníes.