Ocio y cultura

El escenario de los Rolling llega a Valladolid

Inspirado en el teatro londinense en el que se dio a conocer Shakespeare

El estadio José Zorrilla de Valladolid ya está tomado por las más de 100 personas que trabajan en la instalación del escenario para el concierto de The Rolling Stones el próximo día 14. Una puesta en escena que estará inspirada en el teatro londinense en el que se dio a conocer el dramaturgo inglés William Shakespeare.

Más de 115 personas trabajan ya en la ciudad vallisoletana, pero en los próximos días serán más de 600 las que estén de dedicadas a montar el escenario para el sábado. Será uno de las tres puestas en escena con que cuenta la mítica banda de rock para las 21 actuaciones previstas en su gira europea.

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Sus "satánicas majestades" han llegado precedidos de los encargados de sonido, luz y video, y de 40 de los 98 camiones de gran tonelaje, tipo trailer, que desplazan el escenario a la capital vallisoletana. Los camiones y el importante número de vehículos que arrastra la producción del concierto, incluidos 24 autocares, ocuparán prácticamente la totalidad del aparcamiento del estadio, lo que obligará a los más de 37.000 espectadores a acudir a pie al concierto o en autobuses habilitados por el Ayuntamiento de Valladolid.

Lo que más ha llamado la atención de los trabajos previos al concierto es la abertura de un agujero de unos cinco metros de ancho por unos cuatro de alto en el lateral izquierdo del fondo sur del Estadio José Zorrilla. Según explicaron ayer miembros de la organización, este boquete se utilizará para, a través de una rampa que se construirán, introducir en el estadio parte de los equipos de luces y sonido.

Un escenario como un edificio de ocho pisos

Todo el perímetro del estadio está vallado, para que nada interrumpa el trabajo del personal llegado desde Oporto y del contratado en Valladolid. Mucho trabajo que tendrá su recompensa el día del concierto en el que trabajarán unas 1.100 personas en tareas de producción, de organización y de seguridad.

El escenario tiene 28 metros de altura, como un edificio de ocho pisos, por 62 de ancho, lo que mide de ala a ala un Boeing 747, y cerca de 30 metros de fondo. Por lo que necesitará de más de tres días para retirarlo todo después del concierto.

El público estará dispuesto en palcos que están destinados a 228 espectadores que presenciarán de pie el concierto desde los laterales del escenario. El escenario se completa con una pasarela de unos 40 metros de largo y 7 de ancho sobre el césped del estadio, para que los integrantes del grupo puedan llegar hasta el centro del público. En el centro del estadio habrá otro pequeño escenario de unos 35 metros cuadrados para acercarse al público durante una parte del concierto, que durará cerca de dos horas.